Mañana día 10 de diciembre se inicia el plazo previsto por la empresa de salvamento Smit Salvage para intentar reflotar el BLUE STAR, embarrancado en Ares a la medianoche del pasado viernes 22 de noviembre. El plan de salvamento presentado por Smit a las autoridades españolas, que no han puesto objeciones, es el más sencillo posible. Se basa en aligerar al máximo el peso del buque, del que ya se han extraído el combustible y demás líquidos; sellar los tanques de lastre rasgados durante la embarrancada y meterles aire comprimido para mejorar la flotabilidad; preparar una potencia de tiro (BP, bollard pull) de 200 toneladas, para lo que han previsto contar con los remolcadores UNION PRINCESS y BOCA PEGASUS (ambos de 200 toneladas de BP); y por último esperar las condiciones de mar favorables: marea viva y el mayor oleaje posible.
Una vez a flote, está previsto remolcar el BLUE STAR hacia un atraque seguro, examinar detenidamente el fondo del casco y efectuar las reparaciones imprescindibles.
Anticipándose a la posible inundación de la sala de máquinas, en caso de rotura de alguna plancha del fondo al remolcar el buque hacia aguas profundas, Smit ha previsto la disposición a bordo de varias bombas de achique con el correspondiente personal.
Con su habitual precisión, Smit ha presentado un considerable despliegue de medios para ejecutar el plan: un remolcador de 90 toneladas de BP más dos de 200 T de BP; una lancha de transporte y una zodiac; dos helicópteros, uno para traslado de personal y otro para acarreo de materiales; 4 cabos dyneema de 250 metros cada uno; 2 bombas hidráulicas HSP 12 con sus correspondientes mangueras y bocas; 2 bombas de 3 pulgadas con todos los elementos necesarios; y dos compresores de aire comprimido. A esta lista hay que sumar el personal necesario: 1 capitán de salvamento; 1 superintendente; 1 jefe de equipo de buceadores; 4 buceadores profesionales; 3 mecánicos navales; 1 ingeniero naval; 3 especialistas en bombas de achique; 3 operadores de equipo y material; 1 técnico en seguridad laboral y medio ambiente; 1 coordinador en tierra; y 1 administrativo/contable. Además de este despliegue, Smit añade la usual coletilla: los medios de salvamento habituales.
Personas y material están preparados desde hoy para ejecutar el plan en la medida que lo permitan las condiciones de mar y viento. Aunque Smit Salvage advierte que no puede garantizar el resultado -una cautela que acompaña a todos los contratos y acuerdos en materia de salvamento marítimo- lo más probable es que consiga poner el barco a flote y entregarlo a sus armadores una vez atracado con seguridad y sin riesgo de hundimiento.
PRIMER ENSAYO
En el día de hoy, el equipo de salvamento de Smit ha efectuado un primer intento de sacar el BLUE STAR de las piedras. Ha sido una prueba, un ensayo pudieramos decir, de la operación que habrá de efectuarse con mayor altura de marea y más oleaje. El resultado del ensayo ha sido altamente satisfactorio, pues ha dejado demostrado que el buque puede moverse y volver a flotar.