No es el caso de la anécdota del camionero polaco al que los aduaneros de Hook Van Holland le requisaron a la entrada en la UE el bocadillo de chopped, la pera y el zumo por no venir documentados. El problema empieza a adquirir dimensión con la reciente notificación de DB Schenker, uno de los mayores operadores mundiales, que suspende su servicio de carretera entre la UE y Reino Unido.
¿Por qué? Por las deficiencias continuas en la documentación a la llegada. Los importadores británicos no manejan correctamente la documentación y las congestiones crecen. Portavoces de DB Schenker indican que solo un 10 por ciento de los importadores presentan la documentación correcta. Pasa igual en Irlanda del Norte, donde hay desabastecimiento. Y, a todo ello, se le debe unir la ya tradicional (desde hace tres meses, por los menos) congestión de los puertos ingleses, principalmente Felixstowe, Southampton y Londres.
Algunos armadores ya no aceptan cargas desde China y otros puertos de Extremo Oriente para estos puertos, en los que nos niveles de flete desde China, con todos los añadidos que suman los armadores, llegan ya a los 16.000 dólares por contenedor de 40 pies (FEUs).
Todo esto debe hacer reflexionar a muchos: administraciones, organizaciones patronales, empresariales, armadores, operadores, etc. Si las cadenas de suministro se vienen abajo por falta de mercancía en Reino Unido, las consecuencias las vamos a pagar todos. Si las aduanas británicas no son capaces de absorber el tráfico documental que se les ha venido encima, algo se debe de hacer antes que el problema estalle en las narices de todos.
Con los fletes que hace tres meses estaban a 4.000 dólares y hoy a 16.000 por FEU, el valor final del producto carecerá de interés para su importador en Reino Unido y repercutirá a su vez en toda la cadena de suministro.
Así están las cosas y así funciona la economía interdependiente a día de hoy. Algo que el Sr. Boris Johnson seguramente ya había previsto y a la que seguramente pondrá remedio inmediatamente. De otro modo, y a corto plazo, veremos graves problemas para nuestras exportaciones a Reino Unido y para nuestros operadores con este país. Atentos.