Carlos Martínez Campos, un profesional de éxito en el campo de la formación y selección de personal, principalmente en el sector marítimo, escribió hace varios años una novela picante y divertida a la que puso un título inquietante: El caso de la chica de ojos color miel.
Como tantas otras obras, la novela de Martínez Campos apenas tuvo eco y contó con pocos lectores, un hecho cuya frecuencia nada o muy poco tiene que ver con el valor literario del texto. Ahora el autor ha decidido reeditarla y hacer una presentación en la Librería Robinson, de Madrid, el próximo jueves 12 de febrero.
No hace falta ser navegante o practicar el deporte de la vela para contemplar admirados los barcos de recreo, pequeños o grandes yates, o cruceros con más pisos que muchos edificios, y grandes buques mercantes o maquetas de naves antiguas, escribe el autor en la solapa de la novela. Y concluye: La admiración que reciben esas embarcaciones ignora, de forma injusta, otro tipo de naves sin las cuales no se concibe el normal desarrollo del transporte marítimo y la necesaria labor de rescate y salvamento de otras naves y de vidas humanas en alta mar. Ese gran desconocido es el remolcador.
En la contraportada, Carlos Martínez Campos, sintetiza así la trama que discurre por la novela:
Dos hermosas mujeres, una morena, la otra rubia; una alemana, la otra rusa, se ven en – frentadas navegando en un remolcador de barcos que apesta a gasoil y se mueve como una cáscara de nuez en las aguas del Mediterráneo. La rusa gobierna el timón con mano firme mientras la alemana cocina deliciosos guisos para la tripulación, todos envueltos en una triple trama alrededor de Josechu, el personaje principal. Ni el temporal ni las intrigas hacen mella en la firme determinación de ambas jóvenes de cumplir la misión que tienen asignada, en una historia de aventuras salpicada de buena gastronomía, humor y erotismo.
Descripción bastante exacta de lo que el lector encontrará en El caso de la chica de los ojos color de miel: buena vida, un erotismo descrito con maestría y unos personajes que pugnan por vivir con dignidad (se entienda lo que se entienda por dignidad).