Ayer a primera hora de la mañana los veleros de “El Camino a vela” 2023, que navegan este año bajo el lema Educación Azul, soltaron amarras en el puerto deportivo de Muros para recorrer las aproximadamente 30 millas náuticas que les separan de la costa de Barbanza donde recalarán en el Club Náutico Deportivo Barraña de Boiro.
Los peregrinos por mar desembarcaron de sus veleros hacia el mediodía para disfrutar de la tarde en Boiro, la localidad que da inicio al “Camino a Orixe” la Ruta Jacobea que revive la llegada del Apóstol a tierras gallegas. El ayuntamiento ofreció una recepción al grupo de “El Camino a vela”, seguida de una comida en el Pazo de Goiáns.
Este miércoles 28 de junio, hacia la 9:00 horas la flota ha soltado amarras poniendo rumbo a O Salnés para atracar en el puerto de Vilagarcía, donde los peregrinos por mar desembarcarán de sus veleros para remontar el río Ulla, en catamarán, emulando la Traslatio. A bordo disfrutaran de música clásica y una degustación de mejillones de la ría. Su destino, Padrón.
Y ya será el jueves, día 29, tras recorrer a pie el último tramo desde Padrón a Santiago, cuando se culminará, en la Plaza del Obradoiro, la octava edición de esta experiencia sostenible de turismo azul.
Educación Azul
En su octava edición, el Camino a vela navega por la Educación Azul, con el objetivo de “acercar el mar a la gente y la gente al mar”, visibilizando las profesiones marítimas como salida al empleo, especialmente entre los más jóvenes, a través de la educación.
Trece puertos deportivos y marinas de las diferentes localidades por las que transcurre la travesía han recibido a los peregrinos por mar. Tras la salida en La Rochelle, el pasado 6 de junio, los veleros peregrinos han recalado en Hondarribia, Bermeo y Getxo en Euskadi; Laredo y Santander, en Cantabria y Gijón en Asturias, para alcanzar las costas gallegas en Ribadeo y desde allí a Cedeira, A Coruña, Muxía, Muros, Boiro y Vilagarcía de Arousa, puerto final de la navegación a vela.