Y es que, a tenor de las noticias de las empresas españolas del sector, el segmento naviero crecerá. Ya lo hizo en 2016 y también se prevñe que lo haga en los próximos años. Este aumento se debe sin duda a las importantes inversiones que se han llevado a cabo en el último año.
En el acto hubo pleno de ejecutivos del Ministerio de Fomento: la secretaria general de Transporte, Carmen Librero; el presidente de Puertos del Estado, José Llorca, y el director general de la Marina Mercante, Rafael Rodríguez Valero… faltaba el ministro o, en su defecto, el secretario de Estado Gómez Pomar. Cuando un sector crece, como lo hace el naviero, lo correcto es brindarle apoyo.
Durante el almuerzo, patrocinado por Carus PBS, Knutsen Shipping OAS y Man Diesel & Turbo; Alejandro Aznar, eufórico por las cifras, señaló los datos de la evolución durante 2016 de la flota mercante controlada por los armadores españoles que, pese a mantener el mismo número de buques (215) aumentó su tonelaje en un 6,2% hasta 4,16 millones de GT. “Una tendencia positiva que se va mantener en los próximos dos años” ya que, según reveló “a 1 de junio de este año, los armadores españoles tenían un total de 18 encargos en firme de nuevos buques mercantes de transporte, con un total de más de 1.138.000 GT”, por lo que las perspectivas de crecimiento a corto plazo son muy positivas.
Estos nuevos encargos son buques de alta tecnología y, en general, de gran porte (tienen una media de más de 63.000 GT). Se trata de seis buques de pasaje, cuatro metaneros, cuatro petroleros de crudo, dos quimiqueros y dos graneleros, que han sido encargados por siete empresas armadoras diferentes y suponen una inversión total de unos 1.725 millones de euros. Además, de éstos, siete buques, con un valor de 570 millones de euros, se construirán en astilleros españoles, lo que incide en una gran noticia para los propios astilleros estatales.
La entrega de estos buques esta prevista a lo largo de los próximos dos años y, sin contar otras probables incorporaciones en ese periodo, “significará un aumento del 27% en tonelaje, superando la cifra de 5,2 millones de GT, la más alta desde 1985”, destacó Alejandro Aznar.
El Registro Especial de Canarias, una losa para el sector
La cruz del sector naviero es la falta de competitividad del Registro Especial de Canarias (REC). Sus enormes diferencias respecto a otros países del entorno hace que los armadores españoles se vean obligados a optar preferentemente por otros registros de la Unión Europea. Se trata de una situación que no es nueva. Año tras años desde Anave se lamentan de este hecho.
Aznar hizo especial hincapié en que las razones que obligan a los armadores españoles a optar por banderas de otros países de la UE, “no son de índole fiscal, como algunos podrían pensar”. La aplicación práctica del REC ha quedado desfasada en materias como el enrole de marinos extranjeros, horas de trabajo y descanso, delegación y responsabilidad de las organizaciones reconocidas, entre otras. Según explicó Aznar, “hay una complejidad administrativa y una clara inseguridad jurídica sobre el enrole de marinos extranjeros”. Asimismo, según el presidente, «la normativa aplicable a los buques españoles es diferente en varios aspectos a la que establecen los convenios internacionales y la práctica internacional».
En este sentido, los ejecutivos de Anave, encabezados por Manuel Carlier han vuelto a reiterar al Ministerio de Fomento un conjunto de propuestas para restablecer la competitividad que el REC ha perdido frente a otros registros europeos. Pero «no basta con modificar las leyes», añadió el presidente de la asociación, “habría que conseguir que la aplicación de esas normas fuese mucho más flexible, lo que no quiere decir menos estricta, sino más ágil, más rápida, menos burocrática”.
Como ejemplo, Aznar explicó que, aunque la Ley teóricamente lo permite, las normas españolas de desarrollo ha1cen imposible, en la práctica, el embarque de guardias de seguridad privada a bordo de buques mercantes españoles, para protegerles frente a ataques piratas, que se han recrudecido desde finales del pasado año, junto con otros de carácter más bien terrorista, en la zona de Somalia, «a pesar de la OTAN y la EU Navfor recomiendan a los buques embarcar seguridad privada como la medida de protección más eficaz en las zonas de alto riesgo».
El presidente de ANAVE también explicó que, en los próximos dos años y medio, el sector naviero se enfrenta a la entrada en vigor de el Reglamento europeo sobre seguimiento de las emisiones de CO2 de los buques, que obliga a las empresas a implantar planes de recogida de información a más tardar el 31 agosto 2017; el convenio de gestión de aguas de lastre, que entrará en vigor el 8 de septiembre 2017; el sistema de recogida de datos de consumos y emisiones de CO2 de la OMI, desde enero 2019; y la nueva reducción del contenido de azufre en los combustibles marinos, que se aplicará globalmente desde enero de 2020.
En conjunto, estas normas van a imponer, “un enorme trabajo, unas importantes inversiones y un aumento de los costes operativos de los buques para las empresas armadoras”. Aznar indicó que, a pesar de esta enorme presión regulatoria, en la medida en que todas estas nuevas normas medioambientales se regulen exclusivamente desde la Organización Marítima Internacional (OMI) con normas de aplicación global, y no de ámbito nacional o de la Unión Europea, “no producirán distorsiones de la competencia entre los distintos países y sí se traducirán en una mejora adicional del comportamiento medioambiental del transporte marítimo”.
El presidente concluyó su discurso ofreciendo el apoyo de la Asociación de Navieros Españoles a las empresas navieras y la colaboración con la Administración “para asumir y superar juntos todos estos retos”.
Además, durante la jornada y como es costumbre, Anave entregó el anuario estadístico Marina Mercante y Transporte Marítimo, con los datos e indicadores más relevantes del sector en los últimos 12 meses.
Posteriormente tras la recepción se hizo la entrega del Carus Excellence Award 2017, que el consejo de Carus España decidió otorgar este año al armador portugués Luis Miguel Sousa, fundador, presidente y director general del Grupo Sousa, “por su excelencia en la dedicación al sector del transporte y su decisiva contribución al sector marítimo en el Atlántico”.
* Discurso de clausura de la Asamblea General del presidente de Anave
* Anuario de la Marina Mercante y Transporte Marítimo 2016/2017