Cada cual llora a su padre como quiere. Jorge Manrique lo hacía diciendo que cada tiempo pasado fue mejor. Yo lamentando no haberle dicho que me enseñara a preparar aquel cazón en adobo antes de que zarpara.
Pero tampoco seamos así. No es cierto que los tiempos románticos de antaño fueran más nobles que este. Con el tiempo, el olvido borra los malos recuerdos y solo nos deja la imagen de cuando éramos jóvenes y nos creíamos sabios e inmortales. Por ese motivo, los capitanes recuerdan con tanta ilusión cuando eran agregados. Siempre estaba el ‘senyor de la nau’, mirando por encima de su hombro, dejándoles hacer, equivocarse incluso. Por eso es tan duro cuando te haces mayor.
Te conviertes en Dios, y eso es lo peor. De ahí, que los capitanes tengan un camarote para ellos solos: para que nadie los vea llorar.
Todo cambia y todo sigue. Astrolabios, después sextantes y cronómetros, ahora el GPS. Podría parecer que el alma de un marino ha cambiado a lo largo de los siglos, pero no es –o no debería- ser así. Valores como la responsabilidad, el trabajo en equipo, el saber que ahí fuera estáis solos y dependéis de la búsqueda de la perfección de capitán a paje son tan propios de un marino como el buscar la primera tasca al pisar puerto.
250 aniversario de la Facultad de Náutica
Entre los actos para celebrar el 250 aniversario de la Facultad de Náutica de Barcelona, se expone en su sede –que ya merece una visita por si- una selección de cartas manuscritas de los siglos XVIII y XIX. Toda carta náutica es un cuadro abstracto que podría titularse “libertad”, pero estas tienen un valor añadido. Son los deberes de los chavales que antaño ocuparon estas aulas.
Ahora ya no dibujan a plumilla, calculan estibas. Y en cuatro días ni eso, su formación será más la de un gestor que la de un marino tradicional. Pero el espíritu está ahí. El trabajo duro, el maestro que dirige el proyecto, el resultado que debe ser a la vez veraz, práctico y bello. Cuando deje de mirar las cartas no tiene que imaginar a los fantasmas que las dibujaron siglos atrás. Solo tiene que meter, con cuidadito de no molestar, la cabeza en la biblioteca. Ahí siguen.
Exposición cartas náuticas manuscritas (S. XVIII-XIX)
Con motivo del 250 aniversario de la Facultad, la biblioteca expone una selección de cartas náuticas manuscritas realizadas por los alumnos en los primeros años de la escuela (S. XVIII-XIX). Algunas de las cartas se encuentran en versión digital a la que se puede acceder mediante el código QR del rótulo que describe cada carta.
La exposición se encuentra en la primera planta del edificio del 5 al 25 de noviembre de 2019.