El Organismo Público Puertos del Estado (OPPE) ha dado un tirón de orejas a las 28 autoridades portuarias, que representan a 46 puertos de interés general, a cuenta de la escasa información cedida de los datos de servicios al pasaje y de manipulación de mercancías para elaborar el ‘Análisis y conclusiones del estado del mercado de los servicios portuarios 2020’, un documento anual que publica el Observatorio Permanente del Mercado de los Servicios Portuarios desde 2012. En el documento, un borrador, los autores del Observatorio alertan de la escasa información disponible en las diferentes bases de datos consultadas, así como la gran dispersión existente en los datos disponibles. Según añaden, este hecho “impide obtener indicadores económicos y de actividad fiables”. Por eso, propone la conveniencia de que las “Autoridades Portuarias y prestadores trabajaran para obtener ese tipo de información”. Cabe recordar que este es el primer Observatorio que se publica tras el nombramiento de Álvaro Rodríguez Dapena como nuevo presidente de Puertos del Estado.

Así, en su listado de recomendaciones al final del texto, el Observatorio plantea el “impulso de la proyección y el desarrollo del Observatorio Permanente del Mercado de los Servicios Portuarios”. En relación a los datos, el informe concluye que 2020 supuso un descenso de las principales magnitudes del tráfico portuario, viéndose reducidas en un 30,9% las escalas de buques (52.720 menos que en el ejercicio anterior), mientras que, el total de mercancías movidas descendió un 8,7% (48,93 millones de toneladas menos). Mientras, la facturación media de los tres servicios técnico-náuticos es más elevada en la fachada Atlántica – Cantábrica, al igual que en años anteriores, seguida de la Mediterránea – Baleares.
Falta de competencia en los servicios portuarios
En el capítulo de los servicios portuarios, el Observatorio indica que, pese a existir casos de puertos con dos licencias abiertas al uso general para los servicios de practicaje y remolque, no existe competencia, porque o bien porque hay cierta especialización de cada empresa en diferentes tipos de servicio o bien porque pertenecen al mismo grupo empresarial.
En el caso de los desechos recogidos, el documento constata un descenso del 16,2% de metros cúbicos recogidos en los puertos españoles, un 8.5% de servicios menos y una caída de la facturación del 11,2%. El volumen total de desechos recogidos en los puertos españoles durante el año 2020 fue de 695.887 metros cúbicos, correspondiente a un total de 101.400 servicios, generando una facturación de 44,4 millones de euros.
A diferencia de los servicios de practicaje y remolque, en el de desechos generados por buques, la situación más habitual es que en cada puerto existan más de una empresa con licencia para prestación del servicio de recepción de desechos correspondientes a un determinado anexo. El hecho más frecuente en el sistema portuario español es disponer de al menos 2 o 3 empresas prestadoras para cada tipología de desecho anexo I y anexo V, siendo la recepción de los regulados por los anexos IV y VI minoritaria en oferta.
Los puertos que destacan en cuanto al número de títulos habilitantes y empresas prestadoras del servicio son Avilés, Eivissa, Barcelona, Gijón, Las Palmas y Santa Cruz de La Palma con 10 o más empresas prestadoras en total, teniendo algunos como Eivissa y Santa Cruz de La Palma más de 3 empresas para varias tipologías de deshechos. Por el contrario, los puertos como Tarifa, Ceuta, Cartagena, Huelva, Marín, Motril y Pasaia, únicamente presentan una para la prestación del servicio de recepción por tipo de desecho.
Menos facturación en remolque
Como conclusiones del informe, el Observatorio recoge una disminución en la facturación media en el servicio de remolque en 2020, con respecto al año 2019, y un leve incremento en el caso de los servicios de amarre y practicaje. En lo relativo al servicio de recepción de desechos, el número de servicios realizados en los puertos españoles durante el año 2020 fue inferior al de 2019, al igual que la facturación y volúmenes totales recogidos.
Como recomendaciones, en el ‘Análisis y conclusiones del estado del mercado de los servicios portuarios 2020’ se aconseja a los puertos llevar a cabo las acciones necesarias para la adaptación del marco regulatorio de los servicios portuarios españoles a los cambios legislativos implantados. Asimismo, se plantea la necesidad de analizar la influencia en la competitividad del actual sistema de tasas portuarias, coeficientes correctores y bonificaciones. Para fomentar la competencia, se urge a estudiar los requisitos de acceso a la prestación de los servicios portuarios, eliminando las barreras de entrada.
Con el propósito general de mejorar los servicios portuarios, se pide establecer que los pliegos de prescripciones particulares sean ajustados y proporcionales a los costes y que las condiciones de contratación sean equitativas y aseguren la viabilidad del mismo.