Tanto Costa, como Tomás, oradores directos y transparentes, expusieron el marco legal en que se desenvuelve su trabajo en España y mostraron numerosas experiencias prácticas de su labor cotidiana. Josep Costa práctica una media de unos 1200 buques anuales y Vicenç Tomás, 1100.
En el debate que se abrió al acabar sus intervenciones, Costa y Tomás, afrontaron diversos temas y cuestiones polémicas: las exenciones del practicaje obligatorio, el control del tráfico en aguas portuarias, el llamado “practicaje asistido” y la liberalización del servicio de acuerdo con las tendencias políticas europeas. En todos los temas, mostraron ambos prácticos un serio conocimiento de la realidad y una enorme seguridad al tratarlos abiertamente.
Si pudiéramos hablar de conclusiones, al respecto del futuro del servicio de practicaje, por lo que se habló en el acto de la FNB, diríamos que en el futuro se regulará y se extenderá el practicaje asistido y, probablemente, habrá diversas empresas de prácticos que competirán en un mismo puerto y convivirán con los prácticos contratados en exclusiva por las terminales más importantes.