Estos contratos incluyen una importante participación de la industria australiana que será responsable del desarrollo de los sistemas de combate y comunicaciones, así como algunas áreas logísticas y las grúas de carga de cubierta con la empresa Baker and Provan.
En relación al contrato de mantenimiento, se realizará íntegramente en Australia (Nueva Gales del Sur y Western Australia) a través de la filial Navantia Australia y subcontratistas con los que Navantia ya mantiene una buena relación comercial desde 2007, cuando se firmaron los primeros contratos en el país.
Con este contrato, Navantia fortalece su posición como diseñador de referencia de la Marina Australiana. Estos dos buques se unirán a los dos buques anfibios (LHD), tres destructores (DDG) y 12 lanchas de desembarco (LLC) también diseñados por Navantia. Navantia está orgullosa de su participación en el desarrollo de las capacidades navales australianas.
La compañía española tiene una importante presencia en Australia, incluyendo el Centro Técnico de Operaciones, localizado en Adelaida, que será clave para el desarrollo de las futuras actividades ligadas a la construcción naval, aportando la experiencia y conocimientos para abordar los futuros proyectos.