La delicada situación de la naviera Armas Trasmediterránea vivió un nuevo capitulo el pasado lunes con el embargo en el puerto de Barcelona del ferry CIUDAD DE PALMA, un barco que cubre la ruta entre Palma de Mallorca y la capital catalana. El buque fue retenido en el momento del atraque por agentes de la Guardia Civil por un impago de más de 700.000 euros contraídos con la empresa Carus, proveedora de sistemas informáticos. La acción se llevó a cabo, según ha avanzado el diario La Vanguardia, para ejecutar un oficio del Juzgado Mercantil número 7 de Barcelona.
El buque quedó retenido en el puerto con la orden de no abandonarlo hasta que el juzgado no lo indicase, lo que derivó en la anulación de la salida hasta Palma de Mallorca, prevista cuatro horas después de la llegada. Como consecuencia de este embargo, un segundo viaje que tenía previsto realizar Armas Trasmediterránea esa misma noche, esta vez con destino al puerto menorquín de Mahón, se reprogramó y los camiones, vehículos y viajeros se transfirieron a un barco de Baleària, que hacía el trayecto Barcelona-Ciutadella.
Para poder cubrir el servicio con Baleares de forma habitual a partir del martes 1 de diciembre, la empresa activó uno de los buques inactivos que tenía en Andalucía. Fuentes del sector naviero han indicado que no es descartable que la compañía tenga que afrontar otras demandas similares de impagos. Desde Armas Trasmediterránea se han limitado a comentar que el servicio interrumpido el lunes ya funciona con normalidad.
Nueva línea Cádiz-Canarias
Recientemente, la naviera ha estrenado una línea comercial entre Cádiz y Canarias con el buque VILLA DE TAZACORTE. El objetivo de la iniciativa es reforzar la conexión entre la Península y Canarias. El barco se ha reformado en un astillero de Santander, que ha mejorado sus sistemas de propulsión y lo convierten en un buque más ecológico.