A.P. Moller – Maersk ha puesto en marcha una instalación de 8.168 m2 de nueva construcción que dará servicios logísticos a la península Ibérica y al Sur de Francia. La nueva instalación cumple con los máximos criterios de eficiencia energética y sostenibilidad. Localizado dentro del propio puerto, el nuevo centro logístico de Maersk cuenta con los más modernos estándares de construcción y una altura libre útil de 11 metros en la zona de almacenaje que permite ganar mayor densidad de ocupación por metro cuadrado. Además dispone de 39 muelles de carga lo que lo convierte en un almacén de referencia para operaciones de transvase en la zona de Barcelona.
El edificio incluye paneles solares generadores de energía autosuficiente, una instalación eficiente y cargadores de vehículos eléctricos.
Según Diego Perdones, consejero delegado de Maersk para el Suroeste de Europa y el Magreb, “nuestro objetivo es transformar la logística en una ciencia que buscar oportunidades y huir de la concepción de la logística como arte de resolver problemas que tiene hoy. Para ello, trabajamos en la oferta de soluciones integrales para todo tipo de empresas, independientemente de su tamaño y/o sector. En esta nueva nave centramos la desconsolidación de mercancías de importación para su posterior distribución tanto en España y Portugal como en el Sur de Francia”.
Este almacén, certificado bajo el estándar LEED con categoría Gold, ha sido construido por Cilsa bajo la modalidad de llave en mano en la parcela A-30 de la ZAL Port (Prat) de 14.409 m² dentro del propio puerto de la Ciudad Condal.
Para Perdones, “la instalación está dotada de la más moderna tecnología para la actividad logística, un aspecto clave para nosotros en la cadena de suministros global, cada vez está más centrada en el flujo y visibilidad de la información detrás del movimiento de mercancías”.
El objetivo de Maersk es mejorar y ampliar los servicios que presta a sus clientes a los que ofrece servicios logísticos puerta a puerta gracias a soluciones intermodales que garantizan flexibilidad operativa y optimización de costes de transporte al poder acondicionar las mercancías para su recepción eficiente tanto en sus centros de distribución como en las entregas directas a sus clientes finales.
Esta nave de Maersk se enmarca dentro de los proyectos de nueva construcción que Cilsa desarrolla en la ZAL Port (+350.000 m²) y que formarán parte de un parque logístico de más de 920.000 m² construidos.
