Este incremento se ha visto especialmente reflejado en los graneles, líquidos y sólidos, que han aumentado el 8% y el 18%, respectivamente. Cabe señalar, además, que la mercancía general ha moderado su caída, perdiendo 114.000 toneladas (-0,7%), principalmente debido al descenso del tránsito, fundamentalmente en Valencia.
No obstante, sobre las mercancías en tránsito, causantes en gran medida del descenso del tráfico total experimentado en 2013, han recuperado terreno, creciendo un 0,3%, hasta superar los 8,8 millones de toneladas. Igualmente, el tráfico de contenedores, que cerró el año en negativo (-1,3%), ha conseguido un ligero incremento del 0,4%, superando el millón de TEUs. Sin embargo, el tráfico de mercancía en contenedores en tránsito sigue descendiendo, en su caso el 5,27%.
Por su parte, el tráfico Ro-Ro continúa creciendo: una noticia positiva para las autopistas del mar y el short sea shipping, que pone de relieve la competitividad y complementariedad del transporte marítimo-terrestre, con el puerto de Barcelona a la cabeza. Así, en el cómputo global, si 2013 se cerró con un incremento del 3,87% y 44 millones de toneladas, el comienzo del año ha sido muy positivo con un aumento del 7% y 3,5 millones de toneladas.
Por su parte, el tráfico total de pasajeros se incrementó un 9,6%, propiciado particularmente por el crecimiento del tráfico de cruceristas que se ha visto incrementado el 41%. Así, de los 1,6 millones de pasajeros contabilizados, 454.000 fueron cruceristas.