Según los datos publicados en este informe, en los primeros tres meses del año se registraron 43 ataques a buques, de los cuales 33 fueron abordados, dos secuestrados, cuatro sufrieron disparos y otros cuatro ataques fueron rechazados. En estos incidentes, dos tripulantes fueron asesinados y 61 retenidos como rehenes, secuestrados o amenazados.
Este informe destaca los secuestros de dos buques frente a la costa de Somalia, zona en la que ningún buque mercante había sido secuestrado desde mayo de 2012, y en la que además se produjeron otros cuatro ataques fallidos.
También se reseña la continuidad de los actos de piratería en las zonas del Gofo de Guinea, en las costas de Nigeria, y en aguas del Sur de Filipinas, donde en febrero se produjo el asesinato de dos tripulantes antes mencionado. Indonesia también informó de incidentes frecuentes, principalmente robos menores en buques fondeados.