Los fletes de los buques que operan en el mar Negro se han encarecido más de un 20% durante la primera semana de 2023, debido el aumento de las pólizas de guerra, según informa Reuters citando fuentes del sector marítimo. Dicho aumento se ha debido en parte a que desde el pasado 1 de enero, fecha en la que se renovaban las pólizas, las reaseguradoras (que ofrecen protección financiera a las compañías de seguros) han excluido de su cobertura los buques y aviones de Bielorrusia, Rusia y Ucrania.
A causa de esta decisión, las compañías de seguros carecerán del apoyo financiero que les supone la cobertura de estas reaseguradoras en caso de que se produzca un incidente grave. Ello se une a otros factores ya presentes para los buques que operan en aguas del mar Negro desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania, como el riesgo de incautación de buques por Rusia, las minas flotantes o los buques atrapados en los puertos durante largos períodos, entre otros.
Según fuentes de las aseguradoras, ningún buque ha perdido su cobertura, pero se prevé una subida de las pólizas en función de circunstancias específicas; asimismo se calcula que las primas de riesgo de guerra se han encarecido en más de un 20%. Este incremento se suma a la inflación, que el año pasado alcanzó sus niveles máximos en varias décadas. “La salida de las reaseguradoras está reduciendo la capacidad de cobertura en el mercado de los riesgos de guerra y por tanto este año se pagará más por ello”, declararon.
El año pasado, Lloyd’s declaró el mar Negro y el mar de Azov zonas de alto riesgo, incluso antes del comienzo de la invasión rusa, lo que significaba que los buques que operaran en dichas aguas necesitarían una cobertura de riesgo de guerra adicional, que necesita renovarse cada siete días. Además, las pólizas de casco y maquinaria se han encarecido entre un 20% y un 25% desde finales del año pasado y se espera que sigan aumentando.
