La Real Asociación Belga de Armadores afirma que el informe Emter ofrece una visión general muy útil sobre la situación actual del sector para avanzar hacia la ambición de neutralidad de carbono en Europa. Presentado el 1 de septiembre por la AEMA y la AESM, el informe Emter reconoce que el transporte marítimo es un vector esencial para el comercio europeo y un motor de crecimiento económico. Aunque el transporte marítimo representa menos (13,5%) de las emisiones de gases de efecto invernadero que el transporte por carretera (71%) y la aviación civil (14,4%), el sector está decidido a transformarse de forma efectiva para contribuir a alcanzar el objetivo de neutralidad climática de la UE para 2050.
Aunque el informe aborda varios aspectos del impacto medioambiental, se mencionan algunas cifras significativas en los ámbitos de los gases de efecto invernadero (GEI), la contaminación atmosférica y la contaminación acústica submarina.
«El 60% de las emisiones de GEI proceden de los viajes de entrada y salida de Europa y el 40% de los viajes intraeuropeos». En términos de emisiones de GEI, el transporte marítimo es actualmente la forma de transporte más eficaz para el transporte internacional e intracomunitario de mercancías y materias primas, en comparación con la carretera y la aviación. Por tanto, es necesario seguir utilizando el transporte marítimo para evitar que sigan aumentando los niveles de GEI.
El camino hacia los combustibles alternativos
En la actualidad, los combustibles alternativos de bajo o nulo contenido en carbono, así como los motores para quemarlos, no están todavía en el mercado en la calidad y cantidad que necesita la industria naval. No obstante, los armadores belgas están invirtiendo en el futuro, por ejemplo, explorando el uso del hidrógeno o encargando nuevas construcciones preparadas para el amoníaco (lo que significa que, una vez que el motor y los combustibles estén disponibles en el mercado, los buques podrán ser adaptados para quemar, por ejemplo, amoníaco).
Entre los hitos recientes de los armadores belgas se encuentran los siguientes:
- Exmar
Asociación con Nutrien para construir un buque impulsado por amoníaco con bajas emisiones de carbono.
- Euronav
Lanzamiento de un Programa de Desarrollo Conjunto (JDP) para acelerar el desarrollo de buques VLCC y Suezmax equipados con doble combustible (NH3).
- CMB
Construcción de la primera estación multimodal de repostaje de hidrógeno verde del mundo en Amberes.
Hasta que los nuevos combustibles estén disponibles en el mercado y sean económicamente viables, el transporte marítimo debe garantizar que los contaminantes atmosféricos emitidos por los combustibles actuales se reduzcan al mínimo, tanto en el mar como en el muelle. Por ello, los armadores belgas recomiendan encarecidamente el uso de MDO y VLSFO, en lugar de HFO con instalaciones EGCS (‘scrubbers’), para que la contaminación del aire no se convierta en contaminación del agua.
Medidas contra el ruido subacuático
Más concretamente, la RBSA apoya las estrictas legislaciones relativas a los SOx y NOx tanto a nivel de la UE como de la OMI. «Se estima que entre 2014 y 2019, el total de ruido radiado subacuático acumulado se duplicó con creces en las aguas de la UE». Junto con el Departamento Federal belga de Sanidad, Seguridad de la Cadena Alimentaria y Medio Ambiente y el Departamento Federal de Movilidad y Transporte, la RBSA publicó un informe sobre la ‘Reducción de las emisiones y del ruido radiado subacuático para el sector marítimo belga’. El informe identificaba las distintas opciones para mitigar el ruido en el diseño y la explotación de los buques.
Los armadores belgas consideran la inclusión de la mitigación de la contaminación acústica subacuática en su visión del transporte marítimo sostenible. La optimización de la velocidad del buque/limitación de la potencia del motor puede reducir las emisiones, así como el ruido submarino, y la RBSA está a favor de esta medida, a pesar de la falta de apoyo en la OMI.