Así, la terminal de contenedores BEST, del grupo Hutchison, ha pasado de 1.600 a 2.750 puntos de conexión el último julio, lo que supone un incremento del 72%. La terminal refuerza, así, su posición como hub para cargas refrigeradas, ofreciendo a los principales cargadores de productos farmacéuticos y alimentarios un amplio abanico de servicios relacionados con la carga fría y situándose cómo una de las terminales con más conexiones para contenedores frigoríficos del Mediterráneo.
Por su parte, APM Terminals también ha puesto en servicio a principios de este año una nueva pasarela con 152 conexiones para contenedores reefer, totalizando 632 puntos de conexión, que supone un aumento del 31%. Esta inversión implica también una reducción de las emisiones de CO2 de la terminal de unas 600 toneladas al año gracias a la ampliación de la capacidad eléctrica de la terminal, que minimiza el uso de generadores alimentados con fuel. Además, la instalación ha permitido incrementar la operativa hasta cuatro contenedores refrigerados de alto, en vez de los tres que permitían las anteriores pasarelas.
Del mismo modo, la terminal multipropósito Port Nou ha instalado 170 conexiones para dar respuesta en el tráfico creciente de la carga refrigerada.
Una red de servicios logísticos específicos
La apuesta del puerto por disponer de infraestructuras para el tráfico de productos hortofrutícolas y cárnicos se complementa con la amplia red de servicios logísticos específicos: ofrece conexiones viarias y ferroviarias regulares con los principales mercados mayoristas de España como Mercabarna, Mercazaragoza y Mercamadrid, así como con el importante mercado de Saint-Charles, en Perpignan.
Destaca el éxito del servicio ferroviario Canal Frío, que conecta diariamente Zaragoza y Barcelona exclusivamente con carga refrigerada. El servicio regular puesto en marcha recientemente entre Perpignan y Rungis, al Sur de París, complementa la oferta de conectividad que el puerto ofrece a sus operadores y clientes.
Barcelona también ofrece a los importadores y exportadores una completa oferta de líneas regulares de contenedores con los principales mercados emisores y receptores de fruta, verdura y productos frescos. Durante el primer semestre del 2019 el tráfico de estos productos ha superado el millón de toneladas, hecho que supone un incremento del 36% respecto al mismo periodo del año anterior.
Por otro lado, el crecimiento que están experimentando otros tráficos de productos refrigerados, como es la exportación de porcino congelado hacia Extremo Oriente, especialmente China, Japón o Corea del Sur, está facilitando la creación de cadenas logísticas reefer altamente competitivas.
Finamente, el farmacéutico es el otro sector que se beneficia de infraestructuras adaptadas al tráfico reefer para el transporte de medicamentos y otros productos farmacológicos con requerimientos de frío. En el primer semestre de 2019, Barcelona ha vehiculado un total de 2.758 TEUs de estas mercancías, centrado sobre todo en la exportación (2.086 contenedores). A pesar de que el volumen de tráfico de productos farmacéuticos es muy menor al del sector alimentario, se trata de una carga con un alto valor añadido.
El equilibrio entre importaciones y exportaciones del tráfico reefer es un valor añadido del puerto catalán ya que permite a las navieras ahorrar costes de reposicionamento de contenedores. En definitiva, la suma de infraestructuras, servicios y tráfico sitúan a Barcelona como líder de productos frescos del Mediterráneo.