La reach stacker de hidrógeno, uno de los pilotos del proyecto H2Ports que se testeará en el puerto de Valencia, está actualmente en pleno desarrollo en las instalaciones de Hyster. Esta grúa, que será propulsada por pilas de combustible alimentadas con hidrógeno, está previsto que se pruebe durante dos años, en operaciones reales, en MSC Terminal Valencia. Para el repostaje contarán con la Hidrogenera móvil, desarrollada por el Centro Nacional del Hidrógeno (CNH2), que garantizará el suministro de este combustible en condiciones adecuadas tanto para este piloto como para el tractor de terminal 4×4 que se probará en Valencia Terminal Europa, de Grupo Grimaldi, y que también utilizará pilas de combustible.
Una vez que esté completamente desarrollada, se espera que la reach stacker ofrezca un rendimiento comparable al de una carretilla diésel en términos de conducción, capacidad y velocidades de elevación, permitiendo mantener niveles de productividad similares. Además, contará con tracción e hidráulica independientes con diferentes motores eléctricos para dar servicio a funciones específicas. Hyster estima que esta grúa tendrá una autonomía de un día completo, siempre y cuando se combinen la aplicación y la intensidad de funcionamiento adecuadas. Para mayor comodidad y flexibilidad la conexión a la hidrogenera se realizará siguiendo estándares internacionales (norma SAE), permitiendo su uso global. El diseño incluye como opción estándar cuatro depósitos de hidrógeno para almacenar este combustible dentro de la reach stacker.
El hidrógeno es un portador de energía limpia que ofrece la ventaja de un fácil almacenamiento y, cuando se utiliza, no produce más emisiones que calor y agua. La pila de combustible de hidrógeno convierte este combustible en electricidad actuando como un extensor de la autonomía de la reach stacker. La máquina resultante es un equipo de cero emisiones que, si se combina con el uso de hidrógeno verde, también es neutro en carbono. Esta tecnología presenta algunas ventajas en comparación con otras tecnologías de cero emisiones disponibles, como las versiones puramente eléctricas. La solución con hidrógeno y pila de combustible es más compacta para los mismos requisitos (un paquete de baterías para la reach stacker tendría que ser casi tan grande como la mitad de la carretilla para trabajar durante todo un día) y permite un repostaje más rápido (el rellenado de los depósitos de hidrógeno puede realizarse en tan solo 10-15 minutos, un tiempo muy inferior al de la recarga de las baterías eléctricas), lo que marca la diferencia desde el punto de vista operativo.
