De dichos incidentes, 12 fueron secuestros de embarcaciones, tres más que el año pasado. El informe destaca que la detención este año de dos bandas de secuestradores puede dar como resultado un descenso en el número de ataques a pequeños buques de productos petrolíferos.
El director de operaciones de la consultora, Ian Millen ha declarado que, “el control de los actos de piratería somalí son una buena noticia y el testimonio de la efectividad de las acciones llevadas a cabo en el área, aunque (ahora) otras zonas nos provocan una mayor preocupación”.
Para Millen, el Sudeste asiático, necesita urgentemente una solución conjunta para hacer frente a las bandas de piratas que atacan pequeños petroleros de productos y otros buques en tránsito, en especial en el estrecho de Singapur.
El informe también aporta datos sobre otras regiones conflictivas para la seguridad marítima, como el Mediterráneo o las costas de Yemen, en la entrada al Mar Rojo, y hace hincapié en el área del Gofo de Guinea donde el secuestro de las tripulaciones sigue siendo la amenaza más significativa para la gente de mar.