El proyecto de escribir la historia de los Talleres Nuevo Vulcano, esa gran área industrial del frente portuario de Barcelona dedicada a la construcción y reparación de buques, con una excepcional trayectoria de más de 180 años, nace de la iniciativa del Museo Marítimo de Barcelona (MMB). Con tres nombres propios, su director general hasta que se jubiló el pasado año, Roger Marcet; la actual directora, Elvira Mata; y, sobre todo, el responsable del área de “Col·leccions i Coneixement”, Enric García, tal vez la persona clave en el protagonismo cultural que ha conseguido el MMB en los últimos años.
La iniciativa ha estado incubándose durante más de quince años y tiene su origen en la incorporación al MMB del archivo histórico de Talleres Nuevo Vulcano (TNV), en el año 2002. Seis años después, tras un acuerdo entre la empresa, el MMB y el Colegio Oficial de Ingenieros Navales, se encargó a Martín Rodrigo Alharilla la redacción de una historia cronológica de la empresa, que tituló “De Talleres Nuevo Vulcano a Unión Naval de Levante”; y a José María Sánchez Carrión se le encomendó la investigación del recorrido técnico y tecnológico de TNV: “Talleres Nuevo Vulcano, más que una factoría”. Ambos trabajos, sin publicar como tales, fueron utilizados por sus autores para la publicación de “La marina mercante de vapor en Barcelona (1834-1914)”, de Rodrigo Alharilla, editado por el MMB en 2017; y de la ponencia presentada por Sánchez Carrión en el XIII Congreso de Historia de Barcelona, resumen de su extenso trabajo entregado antes al MMB.
Joan Alemany Llovera estudió Economía en la Universidad de Barcelona, donde se doctoró y ejerció de profesor asociado hasta 2013, pero su actividad principal se ha centrado en la planificación urbana y en la economía portuaria, áreas en las que ejerce un indudable magisterio. Autor de una extensa obra escrita, particularmente rica en historia de los puertos de Barcelona y Baleares, era sin duda la persona idónea para ensamblar los distintos materiales existentes, añadir una profunda investigación propia y redactar la magnífica “Construcció i reparació naval a la Barcelona industrial: els Talleres Nuevo Vulcano” (Museu Marítim de Barcelona, 2019). Una obra imponente que supone una aportación de primer orden al acervo histórico del Puerto de Barcelona, a la historia de la Cataluña industrial y a la historia marítima de España.
Los Talleres Nuevo Vulcano se fundaron en la primera mitad de la década de 1830 como talleres de soporte a la primera naviera catalana de barcos de vapor, la Compañía Catalana de Vapores, transformada en 1841 en la empresa Navegación e Industria, naviera que se integró en la creación de Trasmediterránea en 1916, aportando sus barcos y los Talleres Nuevo Vulcano, cuya historia a partir de ese momento queda ligada a la gran naviera, y a partir de 1924 en la órbita de la sociedad creada por José Juan Dómine y Ernesto Anastasio, Unión Naval de Levante.
Alemany recorre en nueve capítulos la densa historia del astillero barcelonés (donde yo embarqué tres veces: en el BELEN, 1971; en el CIUDAD RODRIGO, 1972; y en el ANTARTICO, 1977, mientras reparaban), desde sus inicios hasta verlo reconvertido en uno de los mejores astilleros del mundo para la reparación de mega yates: Barcelona92. Una historia la mar de interesante, documentada con magníficas fotos del autor, y escrita con esa prosa limpia y sencilla que caracteriza al maestro Joan Alemany.