El Consejo Internacional de la Estiba (IDC), la Federación Europea de Transporte (ETF), la Federación Europea de Puertos y Terminales Privadas (Feport) y La Organización Europea de Puertos Marítimos (ESPO) han emitido un comunicado conjunto en el que expresan “su decepción y frustración con respecto a la falta de apoyo y respuesta de la Comisión Europea en varios temas clave para el sector portuario”.
Recuerdan en su comunicado que en octubre de 2020, en una carta enviada a los comisarios Schmidt (Empleo y derechos sociales), Valean (Transporte) y Vestager (Adaptación Digital), los interlocutores pidieron “un diálogo más significativo con la Comisión”. En este sentido “las recientes evoluciones del sector marítimo, que tienen un gran impacto en los puertos, exigen una atención seria por parte de las instituciones de la UE y, en particular, de los servicios de la Comisión Europea”, opinan.
En su texto, los cuatro firmantes señalan que “apoyar o ayudar al diálogo social sectorial a nivel de la UE requiere algo más que escuchar o tomar nota”. En este contexto, cabe mencionar que los interlocutores sociales “han alertado a la Comisión de la UE sobre la situación que prevalece dentro de la cadena logística marítima como resultado de la retirada conjunta y duradera de las capacidades marítimas por parte de las principales compañías navieras”.
A esto añaden que “los efectos de la escasa fiabilidad de los horarios se están propagando en cascada y perturbando no sólo la organización de los puertos y las terminales, sino también la de los clientes y otros agentes de la cadena de suministro”. Y, en este contexto lamentan “que la Comisión Europea no haya hecho un seguimiento de estos acontecimientos”.
Para IDC, ETF, Feport y ESPO, “la actual crisis de Covid-19 ha sido calificada por todos los líderes nacionales y de la UE como un grave calvario que requiere medidas. Todos han proclamado que los responsables políticos y las autoridades públicas deben ser receptivos y prestar una cuidadosa atención a los impactos de la crisis en las industrias y las personas”.
Más acciones que respalden el diálogo
Los firmantes “no pueden sentirse satisfechos por la invitación de la CE a responder a las consultas para expresar sus opiniones” ya que “aunque sean útiles, las consultas no pueden constituir un barómetro fiable y perspicaz sobre la situación que prevalece en el mercado y las dificultades a las que se enfrentan las empresas y los trabajadores portuarios” en Europa. En este sentido, “para que el diálogo social de la UE sea un éxito, es necesario que los servicios de la Comisión Europea mantengan un diálogo más activo y hagan un seguimiento real de la evolución de la situación”, reclaman.
Recuerdan también que “las mencionadas organizaciones han participado en el Diálogo Social Sectorial de los puertos porque creían que la plataforma sería un lugar para celebrar verdaderos debates con la Comisión Europea sobre temas cruciales. Nunca consideraron el Diálogo Social Sectorial como un ejercicio falso o cosmético”.
Así, “sin dejar de ser fieles a su compromiso, y hasta que se reanude el diálogo social, los interlocutores sociales seguirán trabajando bilateralmente a través de grupos de expertos técnicos sobre el programa de trabajo acordado y sobre temas importantes como la Salud y la Seguridad de los trabajadores portuarios, en los que la CE, desde el inicio de los debates en 2014, no ha sido capaz de proporcionar un apoyo más eficaz para encontrar una solución a un problema tan grave”.
Finalmente señalan que “los agentes portuarios, al igual que sus colegas del sector del transporte, han demostrado su sentido de la responsabilidad y su dedicación durante la crisis de Covid-19 y seguirán desplegando esfuerzos para garantizar la continuidad del trabajo y el suministro de mercancías a los clientes”, por lo que “reiteran su invitación a la Comisión Europea para que inicie un debate en profundidad sobre el futuro del Diálogo Social Sectorial de la UE para los puertos”.