«Los puertos europeos siguen siendo firmes partidarios de la política europea de infraestructuras de transporte de 2013, que, literalmente, sitúa a los puertos marítimos en el mapa de la RTE-T. Ha llegado el momento de adaptar el marco a las nuevas realidades del mercado, a los nuevos retos y a las nuevas necesidades. Una de las tareas de esta revisión consiste en examinar de forma más exhaustiva lo que pueden hacer los puertos, no sólo en el ámbito del transporte, sino también en lo que se refiere a la descarbonización de la sociedad y la digitalización de las cadenas de suministro y a que esto se refleje en las directrices. Hoy en día, los puertos son mucho más que un componente del transporte marítimo, tienen un papel fundamental entre los diferentes modos y las diferentes redes», ha expresado la secretaria general de la Organización Europea de Puertos Marítimos (ESPO), Isabelle Ryckbost.
En el caso de los puertos europeos, la revisión debe utilizarse, sobre todo, como una oportunidad para actualizar la red transeuropea de transporte en relación con las nuevas realidades del mercado (como el crecimiento del volumen y el aumento de la escala), los nuevos retos sociales (clima, contaminación atmosférica, ruido, urbanización creciente), las nuevas necesidades (digitalización, automatización, comercio electrónico) y, por consiguiente, el papel cambiante de los puertos europeos.
En un comunicado oficial, ESPO considera que los puertos marítimos son algo más que un «componente de la infraestructura de transporte marítimo». Las nuevas orientaciones de la RTE-T deberían adaptarse para reconocer el papel que muchos puertos marítimos están desempeñando como nodos multimodales estratégicos, nodos de energía y centros digitales, además de su papel clásico como componentes de la infraestructura de transporte marítimo. Su papel único hace de cada puerto europeo un socio estratégico para responder a los principales retos actuales de la descarbonización y la digitalización.
Además, en los últimos años, los puertos europeos han participado cada vez más en un proceso de cooperación, agrupación y fusión, tanto ascendente como descendente. La nueva política de la RTE-T debería tener en cuenta y fomentar esta evolución en el sector portuario. Los puertos europeos consideran que las agrupaciones portuarias deben definirse claramente en el marco de la futura política de la RTE-T. Aunque la agrupación no debería cambiar la identificación inicial de los puertos «centrales» y «globales», los proyectos individuales deberían evaluarse en función de su pertinencia para el clúster y, por tanto, para la red como tal.
ESPO subraya la importancia de las autopistas del mar como parte integrante e importante de la red RTE-T y considera que la dimensión marítima debería considerarse tan importante como los corredores terrestres de la RTE-T. Para aprovechar todo el potencial de los enlaces marítimos de la red, el transporte marítimo de corta distancia debe facilitarse considerablemente como modo de transporte igualmente importante para el transporte intraeuropeo, junto con los demás modos de transporte. En este sentido, los requisitos de las autopistas del mar deben revisarse y los vínculos marítimos entre dos países deben ser plenamente reconocidos y priorizados como transfronterizos.
Por último, ESPO señala que los plazos para la realización de la red transeuropea de transporte básica y completa sólo pueden cumplirse con el pleno apoyo de los Estados miembros, y si el compromiso de la Unión y de sus Estados miembros va acompañado del presupuesto correspondiente. El estudio de ESPO sobre las necesidades de inversión de los puertos europeos ha revelado que las necesidades de inversión de los puertos ascienden a 48.000 millones de euros en los próximos diez años. En el período 2014-2017, los organismos gestores portuarios sólo han podido obtener el 4% del presupuesto de transporte del CEF.
La consulta pública sobre la revisión irá seguida de un estudio de evaluación y otras consultas específicas. La propuesta de revisión de la Comisión está prevista para el primer semestre de 2021.