Esta jornada forma parte de la estrategia de la Autoridad Portuaria para la promoción del puerto de Vilanova en los principales ejes productivos de su hinterland, con el objetivo de captar nuevos tráficos de mercancía, buscar la diversificación de los mercados y fidelizar a las empresas usuarias del puerto.
En el acto, organizado por Ports de la Generalitat y la terminal portuaria de Vilanova, han colaborado el ayuntamiento de Vilanova i la Geltrú, la delegación del Garraf de la Cámara de Comercio de Barcelona y la Asociación de Empresarios del Alt Penedès, Baix Penedès y Garraf (ADEG). Los empresarios asistentes han visitado el puerto y han conocido de primera mano las instalaciones portuarias y los servicios que ofrece el puerto de Vilanova al sector empresarial del territorio.
El puerto de Vilanova es el único puerto comercial que la Administración catalana tiene en la demarcación de Barcelona, y estos últimos cuatro años se ha situado como primer puerto comercial de Ports de la Generalitat y el tercero de Catalunya en actividad comercial. En este escenario, el puerto ha alcanzado un tráfico de 347.467 toneladas de mercancía, de enero a septiembre de 2013, una cifra que supuso un incremento del 87% respecto al mismo periodo del año pasado.
En cuanto a tipología de mercancías transportadas por vía marítima destaca la sal para deshielo, los productos siderúrgicos, la madera y el cemento.
Actualmente, el puerto tiene infraestructuras, equipamientos y servicios suficientes para mover un promedio de 500.000 toneladas de mercancía anuales. Este volumen se podría incrementar en un futuro cuando se apruebe el proyecto de ejecución de la ampliación de la zona comercial prevista en el plan especial del puerto.
El proyecto, que cuenta con un presupuesto de 12 millones de euros, prevé remodelar el dique de abrigo para crear una futura zona de actividades logísticas de apoyo portuario. Con esta ampliación el puerto dispondría de cuatro muelles comerciales con 720 metros de línea de atraque y una superficie de 25.000 metros cuadrados de explanada para mercancías.
El puerto de Vilanova es el único de la demarcación de Barcelona gestionado por la Generalitat de Catalunya que recibe tráfico de mercancías del Garraf y su entorno. Su situación geográfica, a caballo de los puertos de Barcelona y Tarragona, y el fácil acceso desde los principales nudos de comunicación y los centros de producción, sitúan al puerto como un eje comercial para la entrada y la salida de las mercancías del municipio y su área de influencia.
El enclave, especializado en carga general, ofrece sus servicios a empresas que no utilizan contenedores para el transporte de sus productos.