Según Dan-Erik Andersson, vicepresidente de operaciones del puerto nórdico, “creemos firmemente que el GNL es el combustible marino del futuro y estas nuevas normas tendrán un papel clave para su impulso en la región”.
Las nuevas normas cubren el suministro de combustible desde camión-cisterna y el abastecimiento buque-buque. Sus requisitos establecidos engloban desde las zonas de seguridad o la climatología, pasando por aspectos técnicos de las embarcaciones y las terminales.
“Varios puertos de Suecia y de otros países han mostrado interés por nuestro reglamento para usarlo como modelo. Incluso la US Coast Guard se ha puesto en contacto con nosotros”, añadió Andersson.
El puerto de Goteborg espera la visita de uno o dos barcos semanales propulsados por GNL en el próximo año 2016. Aunque, por el momento, el combustible provendrá de terminales externas, el puerto proyecta para un futuro cercano la instalación de una terminal propia de importación de GNL.
También ha establecido un descuento del 30% en las tasas portuarias para los buques impulsados con gas natural lo que, unido al nuevo reglamento, proporcionará un “excelente incentivo” para que las navieras cambien los combustibles derivados del petróleo por el GNL, según indican desde Goteborg.