En este sentido, la prórroga se hará efectiva al día siguiente de la finalización del plazo inicial, siempre que se hayan hecho las inversiones correspondientes. Recordar que con el nuevo marco legislativo el plazo máximo de las nuevas concesiones portuarias ha pasado de 35 a 50 años con el fin de armonizar los puertos del Estado español en materia concesional con el resto de enclaves europeos.
Este nuevo marco se ajusta mejor a los proyectos que requieren importantes inversiones iniciales, tienen más riesgo y necesitan más tiempo para su amortización. De hecho, una característica principal de las terminales automatizadas es la importante inversión inicial frente a las terminales tradicionales manuales.
La solicitud de prórroga de Tercat, la compañía que gestiona la terminal perteneciente al grupo Hutchison, se fundamentaba en las inversiones previstas en el proyecto de explotación de la terminal aprobado en diciembre de 2008, que superaban en más de 120 millones de euros las del proyecto inicial de 2006 (por el que la empresa ganó el concurso público para gestionar la instalación).
Estas inversiones se concretan en la automatización de toda la terminal prevista en el proyecto de 2008, que incrementaba la inversión para las grúas de apilamiento automático de contenedores y la decisión de adquirir ocho grúas nuevas. Así, la petición de Tercat cumple todos los requisitos que la ley establece para el otorgamiento de una prórroga: mejora de la productividad, calidad ambiental y eficiencia energética y la introducción de nuevas tecnologías o procesos que mejoren su competitividad.
La inversión total de BEST, de 580 millones de euros, ha permitido situar el Puerto de Barcelona al nivel de los grandes puertos del Norte de Europa donde hay terminales automatizadas, como Rotterdam o Hamburgo. No existe ningún terminal de estas características y dimensiones en todo el Mediterráneo. Se trata, además, de la inversión china más importante jamás hecha en España.