El comercio mundial está asistiendo ahora a un movimiento de péndulo que si no fuera por el dramatismo de la situación, podríamos calificar de muy curioso.
Efectivamente, ahora que China parece que se despeja y que sus puertos operan con una capacidad de hasta el 90%, las industrias trabajan con bastante normalidad, y hasta el ferrocarril desde Wuhan funciona con destinos internacionales, parece que estemos asistiendo a una reducción del tráfico, que se incrementará con seguridad a lo largo de abril y se mantendrá probablemente en mayo, fruto de la reducción de pedidos por parte de los mercados de Estados Unidos y de Europa
La gente recluida en casa no compra –tanto- y, si no se compra, no se vacían los almacenes. Además, las llegadas de productos procedentes de Extremo Oriente disminuyen por la ralentización de los intercambios y de los transportes no prioritarios, a lo que añadir las demoras que se originan en los pasos fronterizos de algunos países. Y es que la gente, como dice uno, ahora no compra tablets o videoconsolas.
La cuestión es que el péndulo se ha ido ahora hacia “su” lado: la falta de pedidos excepto los de artículos sanitarios harán que muchas industrias chinas, pequeñas y medianas, que las hay, se queden sin pedidos y posiblemente si pedidos, se queden sin financiación. Quienes conocen el mercado chino conocen de la infinidad de pequeñas empresas que viven prácticamente al día en cuanto a facturación y cobro, que sufrirán los efectos de reducción de pedidos por parte de los mercados occidentales.
Así son los movimientos pendulares…
Factores adicionales que incidirán en este panorama serán, entre otros, la saturación de las terminales con contenedores que no se podrán entregar con la celeridad necesaria por la ralentización en toda la cadena receptora. Por lo mismo, habrá ralentización en la cadena exportadora europea y será muy necesario por parte de las autoridades, el aquilatar muy bien los efectos de esta ralentización, para que las economías y los mercados se reanimen antes de final de mayo.
Nada nos dice que después el péndulo vuelva al otro lado de nuevo, hasta que se estabilice.
