El tráfico de mercancías por el puerto gijonés del El Musel creció en 2022 cerca del 15%, hasta superar ligeramente los 19 millones de toneladas, cifra que supera también casi en un millón la media de los últimos 25 años y se encuentra por encima de la del último ejercicio previo a la pandemia. Estos datos, unidos a una firme contención del gasto y una activa política financiera, han posibilitado que el cierre, provisional, del ejercicio arroje a día de hoy un beneficio neto de 13,2 millones de euros, sujeto a la formulación definitiva de las cuentas que tendrá lugar el próximo mes de marzo. El puerto gijonés lograría así su mejor resultado económico desde el año 2000.
El consejo de administración dio luz verde también a un gasto para el actual ejercicio de 1.995.500 euros en 24 licitaciones de los diferentes departamentos, así como una inversión de 18.515.781 euros repartidos en 71 licitaciones. El Registro, creado por el Real Decreto 163/2014, de 14 de marzo, recoge los esfuerzos de las organizaciones españolas en el cálculo y reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero que genera su actividad. En ese marco, en 2016, 2017 y 2018, la Autoridad Portuaria obtuvo los sellos de cálculo de la huella de carbono, y en 2019, 2020 y 2021 el sello de cálculo y reducción; certificaciones de las que disponen sólo seis Autoridades Portuarias en España.
El consejo de administración aprobó dar el nombre del que fue presidente del Grupo Alvargonzález, así como de su naviera Ership – recientemente fallecido – a la línea de atraque y tránsito del muelle norte de la ampliación portuaria, en aras a su estrecha y prolongada colaboración con la Autoridad Portuaria de la que, además, formó parte durante dos mandatos.
