Cabe recordar que el fuego se declaró de madrugada en el garaje del ferry, en donde se transportaban 222 vehículos (algunos de ellos camiones cargados con material de alta combustión), lo que dejó el buque ingobernable y a la deriva.
El accidente causó la muerte de un pasajero de nacionalidad griega que falleció mientras intentaba llegar a un bote salvavidas, además de cuatro heridos de diversa consideración. La recuperación y rescate de los demás pasajeros y marineros está siendo particularmente complicada debido a las adversas condiciones meteorológicas y con la colaboración de la guardia costera de Italia y Grecia y la colaboración de buques de refuerzo de Albania.
Según han informado esta misma mañana fuentes gubernamentales italianas, en este momento aún quedan 168 personas a bordo del buque que podrán ser rescatados en las próximas horas después de que haya partido un remolcador y dos buques de asistencia desde el puerto de Brindisi.
Más grave, aunque de menor repercusión mediática –al menos en España- ha sido el hundimiento del carguero turco GÖKBEL tras haber sufrido una colisión con el mercante de bandera de Belice LADY AZIZA, a la salida del puerto adriático de Ravenna.
El impacto entre ambos buques causó el hundimiento del primero, que tenía 11 miembros de la tripulación a bordo, todos ellos de nacionalidad turca. La desgracia se ha llevado a dos marineros del GÖKBEL, que fallecieron, mientras otros cinco fueron rescatados, y otros cuatro están desaparecidos. El LADY AZIZA tuvo que realizar su retorno a Ravenna para valorar los daños.
Respecto a los desaparecidos, la Capitanía de Ravenna informó que, debido a las pésimas condiciones meteorológicas registradas por la noche, debieron suspenderse las labores de búsqueda de los marineros, que se han reanudado a primera hora de hoy lunes.