Lo hizo durante la reunión que ha mantenido con los presidentes de las cámaras de comercio de Girona, Domènec Espadalé; Palamós, Xavier Ribera Serra; y Sant Feliu de Guíxols, Joan Puig i Valls.
«El Gobierno tiene tomada la decisión favorable de declarar, mediante Orden Ministerial, que el puerto de Palamós se convierta en frontera exterior del conjunto de países firmantes del Acuerdo Schengen», afirmó Fernández Díaz en el transcurso del encuentro, en el que también participaron la directora general de Ports de la Generalitat, Dolors Rodríguez; o la alcaldesa de Palamós, María Teresa Ferrés, entre otras autoridades.
Posteriormente, el ministro del Interior visitó las instalaciones del puerto acompañado por el jefe superior de Policía de Catalunya, Agustín Castro, y el general jefe de la zona de la Guardia Civil de Catalunya, Ángel Gozalo, entre otras autoridades.
Fernández Díaz resaltó que la declaración del puerto de Palamós como espacio Schengen supone «un esfuerzo por parte del Gobierno en la provisión de instalaciones adecuadas para el control efectivo de personas y mercancías, así como en la provisión de efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado cuando sean necesarios para su funcionamiento».
Asimismo, el ministro señaló que dicho esfuerzo «demuestra el interés del Gobierno por desarrollar iniciativas que traten de mejorar la calidad de vida y el bienestar de los ciudadanos, en este caso de Girona». El ministro del Interior destacó también el esfuerzo de todas las administraciones e instituciones implicadas que han hecho posible esta iniciativa demostrando que «cuando trabajamos juntos, los beneficiados son siempre los ciudadanos».
En este sentido, Fernández Díaz subrayó que la consideración del puerto gerundense como frontera exterior de Schengen supone que, además de la libre circulación de personas con origen y destino en países firmantes del Acuerdo Schengen, este puerto se convierte en paso fronterizo exterior para las personas con origen y destino en países no firmantes, lo cual «aumentará las posibilidades de atracción de tráfico de turistas, mejorando la actividad económica de la provincia de Girona».
Cabe señalar que Palamós es el segundo puerto de cruceros de Catalunya, después del de Barcelona: «Sólo en 2014 han arribado a Palamós un total de 34 cruceros turísticos con un volumen de casi 57.000 pasajeros», recordó Fernández Díaz.