La empresa Iveco ha cedido a ATEC un camión propulsado por GNL, demostrando que este combustible es una alternativa real –eficiente, sostenible y competitiva- a las usadas hasta ahora. El puerto de Barcelona apoya esta iniciativa, que ayuda a extender el uso del gas como combustible en el sector del transporte terrestre de mercancías.
La Autoridad Portuaria ha apostado por el uso del GNL como combustible para la maquinaria y transporte terrestre y marítimo en el ámbito portuario como solución sostenible para la movilidad dentro del puerto y para reducir las emisiones de gases contaminantes. Las regulaciones cada vez más estrictas en relación a las emisiones de gases y partículas, y la voluntad de mejora de la calidad del aire de los entornos portuarios han propiciado que el gas natural comience a considerarse como alternativa real a los combustibles convencionales derivados del petróleo para la propulsión de buques, camiones de transporte de mercancías y maquinaria de terminal.
El cambio de combustible se ha comenzado a producir a nivel mundial y los puertos, además, son nodos ideales para el desarrollo de este cambio, porque en estos confluyen las cadenas logísticas con varios modos de transporte.
En cuanto al rol como suministrador, destaca que desde 1969 en el puerto de Barcelona hay ubicada una planta de Enagás, la más antigua de Europa en funcionamiento, con una capacidad de almacenamiento de 840.000 metros cúbicos. Muy pocos puertos en Europa y en el mundo disponen hoy en día de instalaciones para GNL, con lo que esta circunstancia sitúa a Barcelona en ventaja competitiva. Para suministrar a los buques, las empresas Enagás y Suardiaz tienen previstos proyectos de brazos de carga y tanques que permitan utilizar grandes volúmenes.
Implicación de las navieras, y compañías gasificadoras y de transporte
La implicación de las navieras, las compañías gasificadoras (Enagás) y de las empresas de transporte terrestre, como las asociadas a ATEC, es esencial para lograr la implantación del GNL. El puerto trabaja para dar a conocer los beneficios que el cambio de combustible supondrá para la competitividad del transporte debido al menor precio del gas natural respecto de los combustibles derivados del petróleo, un beneficio que repercute en la industria y en otras actividades de servicios. Otra ventaja del cambio es la capacidad para atraer tráficos de compañías navieras y armadores que tengan flota con gas, ya que no todos los puertos podrán disponer de instalaciones de suministro competitivas y con volumen.
La puesta en servicio del primer camión impulsado íntegramente por GNL por parte de ATEC enmarca en las diversas iniciativas y proyectos piloto que han emprendido los operadores y el puerto de Barcelona para contribuir a hacer ver las bondades de este producto como combustible de propulsión y su factibilidad técnica. El puerto está convencido de que a medio y largo plazo el gas natural será un combustible prioritario en la propulsión de buques y de camiones, que podría alcanzar hasta una cuota significativa en 2030 para determinados segmentos de movilidad.
Entre las actuaciones emprendidas y previstas por el puerto para promover este uso, destacan las siguientes: convenio con Gas Natural para promocionar el GNL como combustible de movilidad en el entorno portuario, para vehículos de transporte terrestre y marítimo; Estudio encargado por el puerto y Enagás al Instituto Cerdá sobre la estrategia para la promoción del GNL en los diferentes segmentos de movilidad portuarios; Apoyo a iniciativas de gasificación de varios operadores portuarios: las terminales BEST y TCB, Suardiaz, Baleària-Gas Natural, o UTE-Remolcadors; o la implantación, desde el 2014, de una bonificación del 40% sobre las tasas a los buques, para aquellos que dispongan de motores principales o auxiliares que funcionan con GNL en aproximación, maniobras o durante la estancia que, además, se suma a la establecida por la Ley de Puertos para todo el sistema portuario español y que desde el 2015 es del 50% de la tasa.