Tirón de orejas del Foro Internacional del Transporte (ITF), un organismo que pertenece a la OCDE, a la fiscalidad del transporte marítimo. En sus ‘Perspectivas del Transporte 2021’, que se pueden consultar aquí, el ITF alude “a un problema moral del transporte marítimo”, al que acusa de “descargar sus riesgos en el sector público”. Ante esta situación, a la que añade “la garantía de las navieras de ser rescatadas y las exenciones fiscales”, la entidad apremia a incrementar el Impuesto de Sociedades a los armadores. En este caso, el informe alude a que el transporte marítimo paga el tributo a un porcentaje del 7%, cuando el tipo impositivo legal mundial es del 24%.
El ITF efectúa una serie de recomendaciones políticas, entre las que se encuentran que “los gobiernos den tanta prioridad a la descarbonización del transporte de mercancías como al de pasajeros”. Por eso, insta a las administraciones a “crear casos empresariales para la descarbonización del transporte de mercancías”.
En el informe se proponen una batería de medidas para financiar la descarbonización. Así, plantea “crear un marco coherente de incentivos y sanciones económicas y reglamentarias para alinear los objetivos económicos con los de sostenibilidad. El catálogo podría incluir impuestos sobre el carbono, restricciones de zonificación, mandatos de combustible y rescates condicionados a las acciones de descarbonización”.
Más emisiones en el transporte global
El ITF prevé que la actividad del transporte mundial se duplicará con creces de aquí a 2050 y que las emisiones del tráfico aumentarán un 16% con respecto a los niveles de referencia de 2015, incluso si se aplican plenamente los compromisos existentes para descarbonizar el transporte.
Asimismo, augura que la actividad del transporte mundial de mercancías se multiplique por 2,6 y que las emisiones de CO2 del transporte de mercancías aumenten un 22%. El informe señala que el transporte se encuentra en un momento crucial y que es necesario actuar con valentía para ampliar las medidas de descarbonización del transporte de mercancías, listas para ser adoptadas, con el fin de reducir tanto los costes como las emisiones. Ante esta perspectiva, el ITF urge a implantar una serie de medidas para promover la cooperación internacional, ya que la huella de carbono del transporte de mercancías es tan importante como la del transporte de personas.
Entre las principales conclusiones del informe está la previsión de que el papel de los pequeños actores en el mercado del transporte de mercancías puede disminuir. En las perspectivas, se precisa que “la crisis económica, el aumento de la automatización, la expansión del comercio minorista en línea y la inversión en tecnología del transporte podrían conducir a la consolidación del mercado, dejando menos espacio a los pequeños actores». En el caso del transporte marítimo, incide en la capacidad del transporte marítimo de contenedores para suprimir en masa las tarifas.
Durante la presentación de las perspectivas, el secretario general de la ITF, Young Tae Kim, aseguró que “el informe ofrece a los responsables políticos una serie de información procedente de nuestra investigación sobre los tres principales retos actuales: la pandemia de la Covid-19, el cambio climático y la desigualdad”.