En poco tiempo, el fuego fue extinguido y, hasta el momento, no se han contabilizado heridos entre turistas o entre el personal del crucero. Destacar que este crucero cuenta con 11 cubiertas y tiene una capacidad para albergar a 2.446 pasajeros y 760 tripulantes.
El buque, que cuenta con una eslora de 279 metros y 74.000 toneladas, estaba realizando su ruta habitual hacia la isla de Cayo Coco, en Bahamas y, tras el incendio, el capitán decidió ubicar el buque en el noroeste del archipiélago, a 38 millas náuticas de Freeport, capital del país, lugar donde será reparado próximamente.
La compañía Royal Caribbean realizó a finales del pasado año una remodelación del buque, por un importe de 37,2 millones de euros, en los astilleros de la compañía estatal Navantia, ubicados en el puerto de Cádiz.