Y no es esta una mala noticia. Hasta ahora, lo que vamos conociendo del mercado (si lo podemos llamar así, puesto que el mango de la sartén está en uno solo de los lados) son siempre lamentaciones por parte de los cargadores y subidas espectaculares de los precios del transporte marítimo de contenedores.
Hoy hemos sabido que dos congresistas de los dos principales partidos de EEUU, nos quedamos con el nombre de John Garamendi (será por su innegable apellido vasco) congresista del partido demócrata por California, junto al congresista Dusty Johnson del partido republicano, han presentado una propuesta de ley de reforma de la Ocean Shipping Act que presenta todo un torpedo a la línea impune, e impúdica, de actuación hasta ahora de los armadores.
Avalados por una gran cantidad, tanto de exportadores como importadores, los aspectos principales de la reforma pretenden que se les den oportunidades a los exportadores USA de utilizar los servicios de las líneas marítimas en igualdad de condiciones a los exportadores chinos (en su día se firmó el acuerdo de mutuo comercio que contemplaba igualdad de oportunidades en ambos países para el mutuo comercio), cosa que hoy no se da, según los congresistas. De otro lado los ya conocidos cargos por demurrages&detentions de los contenedores.
Las manifestaciones de Garamendi:

The problem was severe, the control of the shipping by a handful or two handfuls of ocean carriers, really eliminated the competition that had been in place for many, many years prior to the increased consolidation.
El problema es grave, el control del shipping por un puñado o dos de transportistas marítimos realmente elimina la competitividad que ha tenido lugar por muchos años antes de aumentar la consolidación (creación de alianzas).
Y las de Jhonson:
Foreign ocean carriers aren’t playing fair, and American producers are paying the price, It’s time for updated rules of the road. That’s what our bill does.
Tansportistas marítimos de otros países no juegan limpio (fair play) y los productores americanos están pagando el precio. Es el momento de actualizar las reglas del proceso. Esto es lo que hace el proyecto de ley.
Muestran la actitud de centenares de empresas exportadoras e importadoras en EEUU que apoyan la iniciativa de ambos congresistas y que muy posiblemente saldrá adelante dando una seria advertencia a las alianzas de navieros. Ante una situación que no hace mas que empeorar para los interesas de la carga/consumidores
Claro que el World Shipping Council, que agrupa a la gran mayoría de armadores mundiales, está en contra de esta iniciativa y no ve solución en el hecho de tomar medidas contra los armadores cuando la situación es una descompensación entre la oferta y la demanda de transporte. Pero la pregunta siempre está en el mismo sitio… ¿a quien beneficia esta situación? ¿Quién controla el mercado? ¿Quién controla la oferta de manera despiadada? ¿Existe transparencia por parte de la oferta?
Y la Comisión Europea, y en nuestro país la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia siguen regando la begonias en sus preciosas jardineras.