El carguero EEMSLIFT HENDRIKA, de bandera holandesa con yates a bordo y 350 toneladas de petróleo y 50 de diésel en los tanques de combustible, ha quedado a la deriva frente a las costas de Noruega y corre el peligro de hundirse ocasionando graves daños medioambientales, según informa en un comunicado la Administración Costera del país escandinavo.
Construido en 2015 en los Países Bajos, el EEMSLIFT HENDRIKA es un barco de casi 112 metros de largo. Había salido de Bremerhaven (Alemania) el pasado sábado con destino a Kolvereid, Noruega, donde debía llegar el domingo. El lunes, la tripulación emitió una señal de emergencia y posteriormente el Centro de Coordinación de Rescate de Noruega que evacuó a los 12 tripulantes de la nave.
El fuerte temporal de mar que hay en la zona podría volcarlo, como se puede observar en este vídeo, lo que en precipitaría el hundimiento. Por eso, lo que ahora preocupa es la contaminación que podría causar el naufragio. En la cubierta, el EEMSLIFT HENDRIKA transporta yates y barcos pequeños, uno de los cuales ya ha caído al mar debido al fuerte temporal. El mar los ha ido empujando y ahora está a unos 45 kilómetros de la costa, pero está previsto que el viento gire y se pueda rescatar la embarcación.

Operación de rescate del buque
La empresa encargada del rescate del buque es la holandesa Smit Salvagem, con la que ya está trabajando la Administración Costera de Noruega. Esta ha informado que debido al clima registrado en los alrededores, el inicio de la operación de rescate se posponía hasta hoy. El director de emergencias de Noruega, Hans Petter Mortensholm, ha indicado que “realizaremos el rescate con las mejores condiciones de seguridad posible”. Los cálculos del organismo muestran que el peligro de que el barco encalle es pequeño.
El temporal en las costas de Noruega ha remitido, ya que en los últimos días se habían producido olas de entre 6 y 8 metros, vendavales ligeros a fuertes y precipitaciones de nieve.

Los remolcadores BB Ocean y Normand Drott llegaron al siniestro el miércoles por la noche. Los remolcadores son fletados por la empresa de salvamento holandesa Smit Salvage. Según el plan, remolcarán el barco a tierra durante el día de hoy. Cuando el barco esté preparado para ser remolcado, intentaran llevarlo a aguas protegidas y anclar. Luego, el barco debe estabilizarse antes de continuar su transporte.
Mortensholm señala que si el estado del mar lo permite, la intención es situar un equipo a bordo del EEMSLIFT HENDRIKA y atarlo a un potente remolcador como los que mueven plataformas petroleras para desplazarlo hasta aguas más tranquilas.