Esa decisión de la Justicia fue duramente criticada por el gobierno de Italia, que incluso llegó a llamar a consultas a su embajador en Nueva Delhi, Daniele Mancini, amén de enviar a la India al subsecretario de Asuntos Exteriores con el encargo de prestar todo el apoyo necesario a los dos ciudadanos italianos, que se hallaban refugiados en la embajada de Italia en la capital india (ver noticia relacionada).
La postura de Italia en este conflicto tomó aires nuevos con el cambio de gobierno, la sustitución del primer ministro Letta por Mario Renzi. Éste anuncio al poco de tomar posesión del cargo que “estaba explorando nuevas vías de solución”. Probablemente ya sabía que el ministro de Exteriores de la India estaba a punto de conseguir que su colega de Justicia anulara el procesamiento de los dos marineros italianos del petrolero ENRICA LEXIE, en contra del parecer del ministro del Interior, R.K. Singh, quien no se ha recatado en los medios de comunicación de poner en evidencia el conflicto interno en el gobierno de la India. Según Sing, tanto la policía de Kerala como la Agencia Nacional de Investigación Criminal apsotaba por acusar a los dos marineros en base al convenio de la OMI, previsto como arma contra el terrorismo y la piratería.
El conflicto, como es lógico, ha acabado afectando a las relaciones de la India con la Unión Europea, que se ha puesto delo lado de Italia y ha exigido a la India que desmonte una acusación de terrorismo contra los marineros italianos que no responde a la realidad de los hechos.
El caso probablemente no acabará hasta dentro de unos meses. El conflicto interno del gobierno indio, en el que se mezclan intereses electorales y políticos, permite sospechar que la solución del caso va para largo.