El quimiquero ROYAL GRACE,bandera panameña, construido en 1984 con 4274 GT, fue abordado y secuestrado el 2 de marzo de 2012 (hace ya más de un año), en el Golfo de Omán. Se supone que tras largas y más que cuestionables negociaciones, los piratas recibieron el correspondiente rescate. Sus veinte tripulantes, abandonados por sus captores a unas 20 millas de la costa norte de Somalia, necesitaron víveres y asistencia médica, aunque no había heridos a bordo.
Tras dejar al ROYAL GRACE, en su navegación hacia Muscat, bajo la custodia del buque de la Armada española RAYO, la MÉNDEZ NÚÑEZ, encargada de dirigir la vigilancia de las aguas de la costa de Somalia, acudió al auxilio del petrolero SMYRNI, secuestrado el pasado 11 de mayo de 2012 con 26 tripulantes y cargado con 135.000 toneladas de crudo, que acababa de ser liberado por los piratas, tras, se supone, satisfacer un cuantioso rescate. El SMYRNI, un superpetrolero de bandera liberiana, construido en 2011, con 83562 GT, había estado estos diez meses fondeado en una zona de la costa somalí controlada por los piratas. Tras verificar la situación y atender en primera instancia a los tripulantes liberados, el comandante de la MÉNDEZ NÚÑEZ cedió el control armado del buque a un equipo de guardias privados contratados por el armador, que permanecen a bordo mientras el buque se dirige con rumbo norte, hacia Salalah.
Hablando sobre el auxilio prestado al SMYRNI, el contralmirante Pedro García de Paredes, comandante de las fuerzas operativas de la UE contra los piratas del Índico occidental, ha declarado: “Estoy satisfecho de la liberación del SMYRNI. Su tripulación está ahora segura y pronto podrán reunirse con sus familiares, después de diez meses de duro cautiverio. Debemos recordar, sin embargo, que los piratas todavía retienen a dos buques con sesenta marinos sufriendo cautiverio. Las recientes operaciones de la EU NavForce demuestran que los piratas siguen dispuestos a atacar el tráfico marítimo por estas aguas. Debemos insistir en nuestra vigilancia, cualquier descuido puede ser aprovechado por los piratas. El modelo de “negocio” de la piratería en Somalia está seriamente tocado, pero no está todavía quebrado. La amenaza continúa”.