La iniciativa de la Presidenta no ha sido bien recibida por los miles de trabajadores públicos que forman parte del entramado de puertos brasileños con los que el Gobierno de Brasilia ya ha llegado a algún principio de acuerdo que evite, por el momento, huelgas en el sector. En este sentido, Rousseff sostiene que la modernización del sector es necesaria para reducir los altos costos de producción. En cualquier caso cree que la alianza con el sector privado no tiene por qué perjudicar los intereses de los trabajadores.
Para Rousseff, el buen funcionamiento de las instalaciones portuarias brasileñas «necesariamente implica introducir la competencia», por lo que opina que las iniciativas público-privadas deben tomar forma a corto plazo.
En el marco del Programa de Inversión Logística, anunciado por el Gobierno Federal a finales de 2012, existen un conjunto de acciones específicas de inversión clave en los puertos, así como las nuevas regulaciones para el desarrollo de la infraestructura existente de los puertos con el objetivo de estimular el crecimiento económico del país.
A través de la Medida Provisoria 595 (MP 595), publicada el pasado 7 de diciembre, el Gobierno promueve acciones concretas para mejorar la gestión de puertos, impulsar la inversión privada y reducir los costos.
En este plan, las principales acciones de esta estrategia de desarrollo serían las siguientes: impulsar un programa nacional de dragado de puertos y canales, realizar la concesión y el arrendamiento de instalaciones portuarias ya existentes, y la autorización para la construcción de nuevas terminales privadas fuera de los límites portuarios actuales. Asimismo, la Medida Provisoria establece la creación de una agencia para administrar la capacidad laboral en los puertos y el control de la oferta de trabajadores portuarios y los trabajadores independientes portuarias.
Brasil, el país más grande de América Latina y el quinto más grande del mundo, cuenta con una longitud de costa de 7.491 kilómetros —que aumenta hasta los 9.198 kilómetros si se consideran los salientes y entrantes costeros- y que lo convierte en el 15º litoral nacional más extenso del mundo. Hay 37 puertos importantes en Brasil, de entre los cuales el más grande es el de Santos. Asimismo, la red fluvial brasileña es una de las mayores del mundo, con una extensión de 50.000 kilómetros de ríos navegables.