Así, «el lento desarrollo económico ha comportado dificultades para para los propietarios de buques ya que, dado el exceso de tonelaje, han tenido que lidiar con un mercado de carga de mercancías deprimido desde el inicio de la crisis financiera, en 2008».
Bimco, con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) prevé para este 2013 un incremento del Producto Interior Burto (PIB) del 3,6%, y del 4,5% en las transacciones comerciales internacionales «que puede traer algo de alivio a la industria naviera». En este sentido, para la entidad «en la recuperación económica mundial el factor decisivo estará en su afectación en los segmentos de distribución de las mercancías».
En el informe, Bimco señala que durante la segunda mitad de 2012, la voluntad política de las principales economías mundiales, con la introducción de políticas fiscales y monetarias, apuntaló el repunte del desarrollo económico. «Sin embargo, muchos de los indicadores de crecimiento sostenible siguen siendo débiles, como claramente se refleja en la fragilidad de los mercados financieros».
«En la zona euro sigue habiendo signos de estancamiento, ya que la demanda y la confianza del consumidor sigue siendo muy débil. No obstante, hay señales más positivas procedentes de los Estados Unidos que esperan un crecimiento más allá del 2% el año próximo. Por su parte, el informe de noviembre del índice HSBC/Markit Manufacturing PMI ofrece datos para el optimismo, provocado por un estímulo económico», señala el testimonio de Bimco.
Aún así, Bimco cree que 2013 será el punto de inflexión en el escenario macroeconómico. Para la organización, la confianza de los consumidores depende de la situación del empleo y servirá como catalizador en el apoyo de este desarrollo, creando una demanda de bienes, vivienda y energía. En otras palabras, «el desarrollo macroeconómico debe ser un factor positivo en los mercados de comercio marítimo en 2013, pese al riesgo de fragilidad de los mercados financieros, la consolidación fiscal en las economías avanzadas, así como una previsible desaceleración en algunas de las economías emergentes más importantes».
Respecto a la industria marítima en concreto, desde Bimco alertan sobre el hecho de que, como muchas navieras que habían encargado buques antes de la crisis, con la situación económica actual se pausará el crecimiento. En cualquier caso, la expansión de la flota mundial durante 2012 no ha mejorado la situación, a pesar de que los graneles sólidos crecieron en 70 millones de DWT y la flota de portacontenedores creció en 1,1 millones de teus, según los datos de la entidad.
Bimco espera que durante este año el crecimiento se estanque y que la flota de contenedores crezca sobre el 7%, la de graneleros el 6% y la de petroleros un 4,5%.