La conferencia formó parte del seminario de negocios e industria «Barcelona-Río de Janeiro. Ciudad de marca», que tuvo lugar en el Centro Internacional de Negocios de la ciudad carioca.
Según Cambra, la gran reforma del Port Vell y su integración en la ciudad estuvo vinculada a una oportunidad histórica: la adjudicación, en 1986, de la candidatura de los Juegos Olímpicos del 92 en Barcelona. Ante la celebración en Río de Janeiro los próximos Juegos Olímpicos (2016), la ciudad quiere aprovechar la misma circunstancia para transformar su frente portuario, desarrollando el proyecto Porto Maravilha.
Sixte Cambra destacó que este hecho representa una «magnífica oportunidad de colaboración» entre Barcelona y Río de Janeiro, y puso la experiencia del puerto de Barcelona al servicio de los responsables de transformar la ciudad brasileña a través del urbanismo y las nuevas infraestructuras.
Durante su presentación, Cambra destacó los seis factores clave que impulsaron la transformación del Port Vell, entre los que destaca el liderazgo del puerto de Barcelona, con la implicación de la ciudad, en la gestión, proyección y desarrollo del puerto ciudadano, la complicidad y apoyo de las administraciones públicas vinculadas al territorio (ayuntamiento de Barcelona, Generalitat de Catalunya y Gobierno estatal), y la oportunidad histórica que suponían los Juegos Olímpicos. «La planificación de inversiones públicas y privadas, la atracción de grandes marcas y operadores privados y el mantenimiento de la personalidad histórica del Port Vell también fueron determinantes», declaró el presidente del puerto catalán.
Con más de 17 millones de visitantes anuales y una amplia oferta cultural, de ocio y comercial, el Port Vell es hoy un referente mundial de integración puerto-ciudad. «Durante los últimos 15 años, este ámbito del puerto de Barcelona ha generado inversiones por valor de 830 millones de euros, mientras que las empresas y entidades instaladas en el Port Vell han creado 5.500 puestos de trabajo y generan una facturación anual superior a los 400 millones de euros «, expuso Sixte Cambra.
La creación, en 1988, del ente gestor Gerencia Urbanística Port 2000 a iniciativa del puerto y del ayuntamiento de Barcelona, permitió desarrollar el Plan Especial del Port Vell a través de un modelo singularizado de gestión, clave del éxito alcanzado. Cambra destacó la importante labor de conservación y dinamización del territorio que Port 2000 realiza a día de hoy.
Después de la expansión experimentada recientemente por el Port Vell en los terrenos generados por la Bocana Norte, con la construcción del Hotel W Barcelona y la nueva sede corporativa de Desigual, la zona sigue siendo una de las áreas portuarias más dinámicas. Lo confirman iniciativas en proyecto o en construcción como la Marina de la Bocana Norte (30 millones de euros), la ampliación de Marina Barcelona 92 (50 millones de euros) y la reforma del muelle de Pescadores (10,5 millones) y de la Marina Port Vell (30 millones).
La experiencia de éxito del puerto de Barcelona en el sector de los cruceros, también marcada por la celebración de los Juegos Olímpicos, completó la presentación del presidente Cambra en Río de Janeiro. «Los 15 cruceros atracados en el puerto que durante el verano del 92 compensaron la carencia de plazas hoteleras de la ciudad, y representaron una magnífica oportunidad para que la industria crucerística descubriera el potencial de Barcelona como puerto base «, explicó el presidente.
Hoy Barcelona, con más de 2,6 millones de cruceristas al año, es el primer puerto de cruceros de Europa y del Mediterráneo, además de ocupar la cuarta posición del mundo como puerto base. «El modelo singularizado de gestión desarrollado por la empresa Creuers del Port de Barcelona también ha sido un factor determinante del éxito conseguido», manifestó Cambra. Fundada en 1999, Creuers del Port ha exportado su modelo de negocio y participa hoy en la gestión de las terminales de cruceros del puerto de Málaga y de Singapur.