El buque, que navega con bandera de Malta y una tripulación de once personas, tiene previstas dos escalas antes de llegar a su destino para el suministro de combustible: la primera en Santa Cruz de Tenerife y la segunda en St. John’s (en la isla de Antigua).
El año pasado Baleària Caribbean transportó en esta línea más de 145.000 personas (un 15% más que en el año anterior) y facturó 12 millones de dólares. La naviera empezó a operar entre los Estados Unidos y las Bahamas en diciembre de 2011, y desde entonces ha desplazado a 475.000 pasajeros. Además, la naviera trabaja en la apertura de una nueva línea con Nassau, que podría empezar a operar esta primavera-verano, y estudia otros proyectos de expansión en la zona en países como Puerto Rico, República Dominicana y Cuba.