La naviera Baleària tiene previsto construir y explotar la nueva terminal de pasajeros del puerto de Valencia con un proyecto que garantiza que el 100% de la energía eléctrica necesaria se producirá en las propias instalaciones y será de origen renovable: fotovoltaica, eólica, hidrógeno renovable o biocombustible.
Según el proyecto presentado al concurso de la Autoridad Portuaria de Valencia, la estación marítima funcionará con cero emisiones contaminantes y apostará por la economía circular. Esta infraestructura se alinearía con el compromiso de la compañía con la Agenda 2030 de Naciones Unidas y los 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS), que ha asumido como guía de su actividad como empresa ciudadana e implicada en preservar el equilibrio entre el crecimiento económico, el cuidado del medio ambiente y el bienestar social.
La nueva terminal de pasajeros, destinada tanto a líneas regulares de ferries como a cruceros, ha sido diseñada para convertirse en un referente de sostenibilidad en el entorno del puerto y generar valor añadido a la fachada marítima.
La empresa que aspira a ser concesionaria de la nueva terminal de pasajeros invertirá más de 37 millones de euros en la infraestructura, que comprenderá unos 63.000 metros cuadrados y 13.462 de lámina de agua concesionada en los antiguos terrenos de la Unión Naval de Levante (UNL), entre el muelle de Poniente y el muelle del Espigón del Turia.
De 370.000 a 500.000 pasajeros al año
El proyecto elaborado por Baleària contempla un tráfico anual de 370.000 pasajeros en los primeros cinco años de explotación (qua arrancaría en 2023), que se situaría alrededor del medio millón en los años siguientes, con un crecimiento anual pautado del 2%, según la estimación conservadora de la naviera. La compañía calcula que, durante la vida del contrato de explotación, la Autoridad Portuaria de Valencia recaudará unos 70 millones de euros por las tasas preceptivas de buques, pasajeros y mercancías.
En las antiguas instalaciones de UNL se ubicarán las terminales para pasajeros de línea regular y cruceristas, con espacios y operativas separadas e independientes. Se habilitarán cuatro muelles para ferries y cruceros. Un pantalán central de 215 metros: con atraque a ambos lados para ferries y un muelle Norte y un muelle Sur para cruceros. Todos estarán preparados para acoger buques Ro-Ro y Ro-Pax. Además contará con dos explanadas de unos 15.000 y 6.000 metros para el preembarque desde los accesos Sur y Oeste. El proyecto incluye un centro de innovación y ecoeficiencia y un espacio para la dinamización cultural.
Global Ports, el partner para cruceros
De la gestión de los cruceros se encargará Global Ports Holding (GPH), el mayor operador de cruceros del mundo, que apostará por la reducción de ruidos, además de por el reciclaje del 100% de sus residuos en la planta de biometano que se construirá en esa área y que digerirá también los residuos de buques y los propios de la terminal para obtener biogás. Este combustible alimentará una flota de vehículos que con el tiempo serán sustituidos por otros totalmente eléctricos, recargables en los puntos de suministro habilitados en los dos aparcamientos. Se dispondrá de cuatro veces más puntos de recarga de los que exige la normativa.
El proyecto de Baleària incluye la preservación de los elementos de patrimonio de ese entorno que destacan por su valor histórico, según determinó la cátedra Demetrio Ribes de arqueología industrial. Además de las naves, se conservarán dos grúas, la torre del agua y las gradas de los antiguos astilleros de la UNL.
Utor: “Un faro de sostenibilidad y pensada para las personas”
El presidente de la compañía, Adolfo Utor, ha subrayado que la nueva estación marítima “tendrá un corazón verde, espíritu inteligente y será un faro de sostenibilidad en el puerto de Valencia”. “Será un hito para nuestra empresa, un espacio moderno, una terminal de pasajeros alineada con la política ecoeficiente en la que está inmersa Baleària con sus smart ships y su compromiso con los ODS”. “Hemos apostado por una infraestructura racional, pensada para las personas, comprometida con la proximidad y con la calidad de vida de los pasajeros, de la ciudad y del barrio de Nazaret. No hay mejor forma de generar riqueza que no comprometer el bienestar de las futuras generaciones”, destaca el máximo responsable de Baleària.
El proyecto también contempla un centro formativo de la Escuela de Empresa Baleària (EdEB) con oferta en distintas áreas del sector marítimo y especialmente dirigida al barrio de Nazaret, dentro de un plan de acción para involucrar a los actores principales y grupos de interés.
Baleària, que es la naviera líder en movimiento de pasajeros en Valencia en volumen de pasajeros, vehículos y carga rodada, opera en el muelle del Turia desde 2007 y participa activamente en diversos proyectos medioambientales junto a la comunidad portuaria como el Green C. Ports, el Loop-Ports Project, el Seguridad & Protección o el Linghive 2 vessels demand: green and smart links.
Cabe recordar que la compañía que preside Adolfo Utor está acometiendo inversiones por 380 millones de euros en la construcción y remotorización de nueve buques que naveguen a gas natural (GNL), un combustible que reduce un 35% las emisiones de CO2, un 85% las de Nox y elimina el 100% las emisiones de azufre (Sox) y partículas nocivas para la salud. Además, reduce la contaminación acústica en las estancias en puerto. En 2019 fue la primera naviera en navegar a gas natural en el Mediterráneo, el estrecho de Gibraltar y Canarias.