El puerto de Vilanova i la Geltrú es desde hace pocos días un puerto más sostenible con un punto de recarga de vehículos eléctricos para la ciudadanía y 60 placas fotovoltaicas para el autoconsumo de las instalaciones pesqueras, y más integrado al casco urbano con el paseo elevado que se está ejecutando en la zona de Poniente. Las tres actuaciones suponen una inversión de 1,2 millones de euros. A esto, hay que añadir las obras hechas en el edificio del Club Náutico, ya inaugurado oficialmente, por valor de más de un millón de euros.
El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, acompañado del secretario de infraestructuras y Movilidad, Isidre Gavín y del director general de Ports de la Generalitat, Joan Pere Gómez, ha visitado varios proyectos del puerto de Vilanova. En primer lugar, ha puesto en servicio el nuevo punto de recarga de vehículos eléctricos cargando simultáneamente un coche oficial y la furgoneta del puerto, un proyecto que ha impulsado Ports de la Generalitat.
El consejero ha explicado el esfuerzo que han supuesto todas estas actuaciones, y como se ha llegado “gracias a un consenso con el consistorio y a través de un plan especial que se ha debatido mucho y que gusta todo el mundo. No es una actuación puntual sino continuada. Primero ir adecuando el puerto a sus usos y después ir consiguiendo esta integración de la ciudad con el mar y que todo el mundo lo pueda disfrutar”.
Calvet ha puesto en valor el hecho que la inversión pública, que en el plan de inversiones de Ports de la Generalitat todavía está previsto que lleguen hasta unos 2,5 millones de euros, incentiva la inversión privada. “No es una obra menor. Estas actuaciones, además, provocan a la vez otras obras del sector privado. El puerto también es un activo económico muy importante para la dinamización de la economía del país y para la generación de ocupación, en concreto, por Vilanova, el Garraf, y el Penedès. Ejemplo de esto es la inversión de Vilanova Grand Marina, una marina de gran eslora que ha contado con una inversión privada muy importante por parte de Pendennis y que aportará valor añadido al puerto”, ha explicado.
El viernes tuvo lugar también la inauguración del nuevo edificio social del Club Náutico de Vilanova. Esta actuación forma parte del compromiso que el Club Náutico Vilanova adoptó en la renovación de la concesión de la explotación de la dársena deportiva el 2015 hasta el 2040 con Ports de la Generalitat. El nuevo edificio se ha reconstruido en el mismo lugar donde estaba el antiguo, pero se ha añadido un primer piso, donde ha ubicado el restaurante, que permite unas vistas inéditas y privilegiadas de la zona portuaria integrada en la fachada marítima de Vilanova i la Geltrú.
El titular de Territorio ha puesto como ejemplo las actuaciones en el puerto para afirmar que “estamos saliendo de una crisis sanitaria muy importante y ahora toca invertir, crear las condiciones que nos permitan reactivarnos económicamente y de manera muy orientada a la agenda verde, para que nos ayuden a proteger socialmente los ciudadanos del país”.
Un puerto más sostenible
El puerto de Vilanova i la Geltrú se ha dotado de un punto de recarga rápida, que permite la carga simultánea de dos vehículos tanto con corriente continua como alterno, con una potencia de hasta 50 kW. El tiempo estimado de carga de un automóvil es de 15 a 20 minutos, según la batería del vehículo. Este punto tiene un coste 32.776 euros.
Los puertos que se están equipando con puntos de recarga son Llançà, el Port de la Selva, Roses, l’Escala, Palamós, Sant Feliu de Guíxols, Blanes, Arenys de Mar, Vilanova i la Geltrú, l’Ametlla de Mar, l’Ampolla, Deltebre, Sant Carles de la Ràpita y Les Casas de Alcanar.
Energía solar en la lonja
La lonja de Vilanova producirá a partir de ahora la energía eléctrica gracias a la instalación de 60 placas fotovoltaicas de 400 vatios de potencia que transformarán la irradiación solar en energía eléctrica para el autoconsumo del recinto pesquero, con una inversión de 46.450 euros.
Las placas solares dan cobertura eléctrica en la sala de subastas, la zona de almacenamiento y envasado del pescado, las oficinas y los servicios complementarios. No incluye la fábrica de hielo porque tiene una potencia diferente, y se estudiará más adelante. Esta apuesta de Ports de la Generalitat por la energía renovable supone que las instalaciones pesqueras de Vilanova dejarán de emitir 7,5 toneladas de CO₂ a la atmósfera cada año, en beneficio del medio ambiente y del clima.
Nuevo paseo elevado
Por otro lado, encima del rompeolas del contradique se está construyendo un nuevo paseo elevado como zona de paseo para los ciudadanos al lado del mar. Este paseo tiene continuidad en el paseo que viene del parque de Ribes Rojes y a un tramo del carril bici. El objetivo del proyecto es convertir esta parte del puerto en un espacio singular de Vilanova que forme parte de su identidad y se convierta en un atractivo turístico para la ciudadanía y los visitantes. El proyecto tiene una inversión de 1,1 millones de euros y se prevé finalizarlo a mediados de agosto.
El nuevo paseo tiene una anchura de 6 metros y una superficie de 9.587 metros cuadrados. Se ha incorporado una rampa para facilitar el acceso a las personas con movilidad reducida. Dispone de dos miradores, el primero, junto a las instalaciones de “la Dorada” con gradas peatonales y, un segundo, donde hay la baliza roja del puerto, a tocar de la bocana, con el objetivo que los ciudadanos y ciudadanas puedan observar la actividad portuaria y el mar. Además, en el segundo mirador se pondrá el nombre “Vilanova i la Geltrú” en letras corpóreas grandes, para situar los navegantes. Ahora se tiene que hacer la urbanización del paseo.