La Autoridad Portuaria de Barcelona, por su parte ha informado a NAUCHERglobal que, a las 09:00 del dÍa de la fecha se activó el Plan de Autoprotección, en fase de alerta. Al respecto, se movilizaron las unidades marítimas y terrestres pertinentes. Después de una primera inspección a bordo realizada por oficiales del transbordador e inspectores del plan, se observaron averías en el bulbo y en la proa, sin que afectasen al mamparo de colisión, se procedió a atracar el buque en su atraque usual, en el muelle de Poniente Sur. El accidente fue consecuencia de una caída de planta del equipo eléctrico (black out), que dejó al buque sin propulsión y con el timón metido 10 grados a una banda. Según ha declarado a NAUCHERglobal el capitán marítimo de Barcelona, que se personó de inmediato en el lugar del accidente junto con la oficial de seguridad de la capitanía marítima, el buque fondeó las anclas y tensó las cadenas para amortiguar la embestida contra el muelle, aunque no pudo evitar la colisión.
No hubo daños personales ni medioambientales. El buque se encuentra detenido a espera de realizar las investigaciones sobre el fallo eléctrico y los daños estructurales del casco.